Martín desquicia a Bagnaia y lo manda a la Q1
El español se pega a la la rueda del italiano a poco del final, le espera en la puerta del box y celebra la bandera amarilla que deja a Pecco sin el último intento.
Si esto es sólo en viernes, la que se puede liar en el fin de semana del GP de Valencia en MotoGP... Martín aún quiere el título y la primera jornada del Ricardo Tormo le da motivos para soñar, porque ha sido capaz de desquiciar a Bagnaia y mandarle a la Q1, lo que es un problema con todo lo que hay en juego y en un circuito como el de Valencia, en el que hay menos puntos de adelantamiento que en otros.
La sesión la ha liderado Maverick, con récord de pista incluido, y con 0.147 de ventaja sobre un Martinator que ha hecho perfectamente los deberes de la primera jornada y que se irá a dormir más tranquilo que Bagnaia, anclado en una pobre decimoquinta plaza, a 0.659 de la cabeza, le que obligará a pasar por el purgatorio de la Q1. Ahí se encontrará con otros diez rivales que perseguirán las dos primeras plazas de la repesca que dan acceso directo a la Q2. Entre la competencia más directa que tendrá el campeón, destacan los nombres de Álex Márquez (12º), Quartararo (13º) y Marini (17º). También está Bastianini (11º), pero es de esperar que esta vez a La Bestia le digan en el box del Lenovo Ducati que no puede acabar la sesión por delante de Pecco.
El líder de la general, con 21 puntos de ventaja sobre Martín, firmó en Cheste su segundo peor viernes de la temporada (fue 16º en Indonesia) y a ello contribuyó en la medida que pudo el madrileño de San Sebastián de los Reyes. A cinco minutos del final, y viendo que su rival estaba fuera de las diez primeras plazas con acceso directo a la Q2, el del Prima Pramac pasó a convertirse en una sombra de Bagnaia. Se pegó a su rueda, esperó en la puerta del box a que volviera a salir, haciendo caso omiso a Tardozzi, team manager del Lenovo Ducati y el mismo que le decía que arrancara y saliera a pista. Por supuesto, Martín no le hizo ni caso y, cuando vio que Bagnaia reanudaba la marcha, aceleraba para salir cerca de él, aunque para ello tuviera que esquivar al citado Tardozzi, colocado donde no debía en ese instante.
Ya en marcha, el líder le hizo con la mano izquierda gestos al segundo de la general para que se pegara a su colín, algo que iba a hacer incluso sin esa señal, y poco faltó para que se tocaran a la salida del pit lane. Ya en la pista, Bagnaia se salió voluntariamente y Martín lo hacía tras él, para seguir pegado a su rueda en su frustrado penúltimo intento de vuelta rápida, que a la postre resultó el último. Fue así porque la caída de Pol obligaba a la aparición de la bandera amarilla y a que los pilotos redujeran la marcha, lo que Martinator celebró con un gesto de aprobación desde su Ducati moviendo con energía la cabeza. Ahí tenía el objetivo cumplido: Bagnaia fuera de la Q2 por el momento y con trabajo extra para el sábado.
Esto no ha hecho más que empezar, pero de momento es el español al que le salen los planes, porque su segundo puesto inicial es de oro combinado con el decimoquinto de Bagnaia, sin hueco entre los diez con acceso directo a la Q2, que han sido, Maverick, Martín, Zarco, Di Giannantonio, Bezzecchi, Binder, Márquez, Raúl Fernández, Miller y Aleix. Pasarán por la Q1, Bastianini, Álex Márquez, Quartararo, Morbidelli, Bagnaia, Nakagami, Marini, Augusto Fernández, Rins, Savadori, Pol y Mir, que no ha rodado por la tarde fruto de la caída de la mañana. El latigazo cervical recibido le ha llevado a guardar reposo antes de intentar probarse mañana, día de la calificación y del esprint en el que Pecco tendrá su primera bola de título, que pasa por meterle cuatro puntos más a Martín, lo que es una victoria suya combinada con un tercero de su rival, algo que cuesta creer que suceda viendo cómo ha ido el viernes.