Márquez reacciona a la marcha de Rins: “Será porque la Honda no es tan buena como decía”
El ilerdense, que ha vivido con la moto de 2023 “uno de los peores momentos” de su carrera, se extraña de la decisión de Álex: “Dijo que se podía ganar con ella”.
Lesiones aparte, la presente temporada de MotoGP está siendo una de las más atípicas de Marc Márquez. No sólo faltan los triunfos, que en este momento ni siquiera son la prioridad, sino que también se ha perdido la motivación de un piloto que comenzó el año “con el objetivo de luchar por victorias y por el Mundial”. Sin embargo se encontró con una Honda que le está haciendo atravesar “uno de los peores momentos” de su carrera como reconoció en Assen, tras cruzar la meta en la 17º posición del esprint. Se trataba de su peor resultado histórico, pero también de un baño de realidad en el que, como ha reconocido en Motorsport, asumió que no están preparados para luchar por esos objetivos.
“No puedo afrontar la segunda parte de la temporada pensando en luchar por los primeros puestos”, reconoce Marc sobre lo que espera tras el regreso de unas vacaciones que le han servido para recuperarse física, pero también mentalmente. Sobre las lesiones que arrastraba (tras las cinco caídas de Sachsenring), de las costillas se recuperó “muy bien, muy rápido”, pero el tobillo derecho le ha dado más trabajo: “Me ha molestado más. Lo tenía muy inflamado porque me rompí un ligamento y a día de hoy tengo muy inflamada la zona. Este tema del tobillo me ha ido generando molestias en toda la pierna derecha, tanto en la rodilla como en la zona del pubis. Pero físicamente puedo decir que ahora estoy bastante bien”.
Precisamente esas lesiones son las que, en parte, le impiden pensar en los objetivos más ambiciosos. Después de tantas caídas “ha sido imposible coger el ritmo y tener confianza” para Márquez, por lo que “el objetivo para esta segunda parte de la temporada es ser, quizá, menos explosivo y no buscar resultados, pero con el objetivo de intentar seguir creciendo con el proyecto y, sobre todo, volver a tener confianza en mí mismo y en el ritmo de carrera”. ¿Eso quiere decir que Marc cumplirá su contrato con Honda hasta 2024? La respuesta no despeja las dudas: “He podido pensar y valorar. Sobre todo, cuando estás calmado en casa es cuando puedes pensar qué ha sucedido en esta primera parte de la temporada, qué has hecho mal, qué has hecho bien... y una de las cosas que tenemos que cambiar es la manera de afrontar las carreras”.
Márquez se centra únicamente en lo que sucede sobre el asfalto y también, en la fábrica de Japón. “Una de las cosas que he querido hacer, es estar siempre conectado tanto con Alberto Puig como con el equipo de test. Bradl ha estado probando en Misano y Jerez, y cuando llegue a Silverstone me dirán exactamente qué ha llegado nuevo y qué no. Sé que el equipo de pruebas ha estado trabajando, pero luego hay que ver en la práctica si funciona o no″. El octocampeón no descarta estar entre los cinco primeros “en algún circuito puntual”, pero insiste en que su realidad ahora mismo es otra completamente diferente: “Soy humano y por más que sepa ir rápido en moto, tener el ritmo de carrera es otra cosa”.
“Respetamos la decisión de Rins”
Cuando habla de esas excepciones, Marc hace referencia a Le Mans o “el caso de Álex Rins en Austin”, donde ganó la carrera con una Honda de la que se despedirá a final de esta temporada. El español se marcha a Yamaha y la decisión ha dejado extrañado a un Márquez, que cuestiona el movimiento: “Me extraña sobre todo porque él mismo dijo que la Honda no era tan mala moto, que se podía ganar con ella. Que en tan poco tiempo ya piense en marcharse a otra marca me sorprende. Pero respetamos su decisión y si se marcha, será que no ve que la Honda sea tan buena moto, sino que está buscando otro proyecto”. Proyecto que en el caso de Marc, de momento, sigue siendo el de siempre.