Las dudas irritan a Ducati

Dicen que una imagen vale más que mil palabras y a juzgar por lo que se vio el domingo en televisión, la euforia en Ducati es total cuando el primero en ver la bandera a cuadros es Bagnaia. Eso no quiere decir que desde la fábrica italiana no se alegren del resto de victorias que aporten el resto de pilotos al manillar de la Desmosedici, pero con el título en juego, ciertas celebraciones pueden dejar lugar a dudas. Sobre todo porque en el mismo GP de Indonesia, el entusiasmo de Davide Tardozzi, director deportivo, y Paolo Ciabatti, responsable de la división de carreras, por el triunfo de Martín en la esprint no fue tan descarado como un domingo en el que Pecco volvía a lo más alto cinco grandes premios después.

Esa victoria devolvía al italiano al liderato de la general, que le arrebató precisamente el sábado Martín. La renta de Bagnaia crecía de nuevo hasta los 18 puntos tras la caída del español durante la carrera y por cómo se vivió ese momento en el garaje oficial de Ducati, el discurso de los últimos grandes premios perdía todo el sentido. Desde Bolonia aseguran que a ellos les da igual quién gane, siempre y cuando lo haga una Desmosedici, y que jamás moverán ficha para favorecer a un Pecco que también quiso salir al paso de los rumores dejando claro que “ni hubo órdenes de equipo el año pasado ni las habrá este”, en su batalla con Jorge. Pero las dudas no desaparecen, sobre todo, por imágenes como las del domingo.

El propio Ciabatti es consciente de que “la gente piensa que Ducati no quiere que Jorge pueda luchar por el título”, pero al italiano esa afirmación le parece “una injusticia”. Y se explica en GPone: “Esta discusión me irrita porque, como todo el mundo sabe, el equipo oficial y el Pramac tienen las mismas motos. En Pramac hay siete ingenieros de Ducati, Pecco y Martín tienen las mismas actualizaciones, lo último las aletas de las horquillas”. Desde Borgo Panigale siguen defendiendo su argumento e insisten en que “si Ducati no quisiera que Martín compitiese por el Mundial, no tendría las mismas opciones que tiene Bagnaia”. Algo con lo que el español cuenta por burocracia y que no es sinónimo de que unos triunfos se celebren más que otros.

Es cierto “que la empresa tiene a cuatro pilotos bajo contrato (Bagnaia, Bastianini, Martín y Zarco) y les paga a todos para ganar”, pero al final Ciabatti acaba reconociendo “que todo el mundo espera que gane el equipo rojo, teniendo en cuenta las responsabilidades hacia los patrocinadores”. Igual la solución hubiese estado en darle a Jorge la oportunidad de vestir de rojo en este 2023, pero ante la imposibilidad de retroceder en el tiempo, sólo queda ver quién es el mejor. Porque el italiano descarta cualquier favoritismo: “Si de verdad existiese la preocupación de que Pramac pudiese ganar, no le daríamos las mismas actualizaciones que al equipo oficial para poner a Martín y Bagnaia en igualdad de condiciones”. Por eso en pista, sigue habiendo libertad.

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