Aleix tuvo invitado de lujo en Australia: ‘Purito’ Rodríguez
El exciclista dice que “MotoGP es espectacular” y el de Aprilia opina que “le ha pasado en las bicis como a Pedrosa en las motos”.
De sobra es conocida la afición al ciclismo de Aleix Espargaró, y lo bien que se le da, tanto que en su día podía haber probado pasarse al profesionalismo con las bicis. A ello ayuda que es amigo y se entrena con cracks del nivelazo de Joaquim ‘Purito’ Rodríguez, el mismo al que se llevó a Australia como compañero de viaje. El catalán lleva retirado desde 2016, pero se le ve en muy buena forma, tiene un enorme palmarés que será eterno y es un lujo tenerle por el paddock para charlar con él sobre Aleix, sobre MotoGP en general y de ciclismo, porque tiene muy claro por quién se decanta entre Tadej Pogacar y Jonas Vingegaard.
Antes de leer a Purito, primero Aleix explicando a AS su relación con él: “A Purito siempre le digo que le conocí como un ídolo, en una marcha cicloturista en Circuito de Cataluña hará mil años y le fui a ver a una etapa del Tour de Francia, al Tourmalet, y luego me fui a vivir a Andorra y, cuando llegué hace once años, él ya llevaba tiempo ahí, me acogió, empezamos a entrenar juntos y ahora es de mis mejores amigos. Vivimos juntos, aunque cada vez entrenamos menos y hacemos menos vida social porque nos hacemos mayores, pero tenía ganas de venir a una carrera de fuera, los dos solos, y le dije que Australia era una carrera muy especial siendo mi último año, y aquí está”.
Y sobre el enorme ciclista que fue, Il Capitano de Aprilai resalta que “lideró tres años el Ranking UCI de puntos, lo que es muy, muy complicado. Le ha pasado un poco como a Pedrosa, porque su palmarés no ha sido justo con lo bueno que ha sido. No es justo que no tenga ninguna grande. Si analizas su carrera, de verdad que es injusto, pero ha ganado clásicas y ha hecho podios en todas las grandes. Ha sido uno de los mejores ciclistas de la historia, sin duda, y yo que le conozco desde dentro, ha sido un tío que fue de los pioneros en crear equipo, lo sé porque conozco a sus compañeros, haciendo el trading camp, irse a hacer altura con compañeros de equipo, rodearse de su gente... la verdad es que eso es algo que he aprendido bastante de él”.
Ya hablando con Purito, dice: “He ido a todos los GGPP que hay en España, invitado por Aleix o por Dorna cuando aún yo corría, pero tenía ganas de hacer uno de fuera y me he venido al más lejano que había. Aleix ya me advirtió que es el circuito más guapo para el piloto o muy duro si había malas condiciones como está habiendo”.
Para el escalador, porque lo será toda la vida, “MotoGP es un deporte espectacular. No sé si es porque también van sobre dos ruedas y el paralelismo de las trazadas y demás, pero también es muy, muy duro. No sólo es darle gas y tener clase encima de la moto. Detrás hay un trabajo espectacular, de ellos y del equipo. Ahora que estoy en el box, te vuelves loco con los ángulos, la aerodinámica, las suspensiones, la electrónica... Hay mil cosas detrás de lo que es darle gas a la moto”.
Entiende que “lo más duro son las lesiones, sin duda, y el pensar cómo entran en un circuito como éste a la primera curva, casi a 300 y viendo más el agua del mar que el asfalto... Yendo en coche ya me asusté así que no me quiero imaginar el ir en moto y en grupo, como van ellos. Espectacular”. Encuentra un claro paralelismo entre su deporte y el de las motos: “El concepto de ir en moto o en bici bajando un puerto es muy parecido por la trazada. Eso es lo más parecido que puede haber entre motos y ciclismo. Lo que es alucinante es que para su entrenamiento sea muy importante el ir en bici y a nosotros nos lo tengan prohibido. Yo voy en moto ahora, que tengo una TMax y una de trial, teniendo además de vecino a Toni Bou, así que mejor maestro no se puede tener, pero seguirle a él es imposible y no se puede decir que me haya enseñado algo”.
En cuanto a la retirada de Aleix a sus 35 años, Purito cree que “la suerte que ha tenido Aleix es que ha podido decidir y su decisión está muy meditada, así que está disfrutando de su momento y de sus últimas carreras. Ha llegado al circuito a las ocho de la mañana y creo que ha sido el primero de MotoGP en llegar, así que se nota que está disfrutando. Cuando decidió retirarse es porque ya le faltaba la ambición para estar al máximo, pero lo está dando todo para dejar este deporte como se merece. Pocos pilotos pueden hacer lo que hizo él en Cataluña, que anunció su retirada y ganó. Para mí ese esprint fue su despedida más de lo que vaya a pasar en Valencia. Escribió un libro con final feliz”. Su retirada le servirá de ejemplo a Aleix: “No he echado nada de menos la competición. Me pregunta Aleix y le digo que la moto va a seguir siendo su vida siempre, y seguirá como probador de Honda. Para mí lo mismo con la bici. Monto cada día que puedo, sigo toda la información de ciclismo, porque no puedo vivir sin él. Y tengo mi marcha cicloturista en Andorra y soy embajador de varias marcas, todo relacionado con el ciclismo”.
El de Granollers no es el único piloto al que conoce y no tiene problemas en contar cuáles son a los que más admira: “Por suerte, conozco a muchos de la parrilla. A Martín, Rins, Acosta, los Márquez. He tenido la suerte de tener relación con todos ellos y siento especial admiración por Jorge. Para mí él es junto a Márquez el más espectacular de ver encima de la moto. Le hemos visto tocar con rodilla, codo y hombro, en una imagen que hasta Will Smith fue capaz de colgar en su perfil, porque era algo sobrehumano. Viéndole te preguntas dónde está la gravedad. Yo creo que gana este título y antes de llegar a Valencia, porque como no se decida antes le da tiempo a llegar a Márquez también con opciones a Valencia, porque está tocado con la varita”.
Pogacar o Vingegaard
Para despedirnos, hablando con un entendido en ciclismo como él, había que preguntarle con quién se queda del dúo Pogacar-Vingegaard, y lo tiene muy claro: “Pogacar, Pogacar, porque para mí es el corredor de la historia. Este ciclista va a superar incluso los números de Merckx. Le va todo. Es espectacular. Y de la forma que lo hace. Es un tío que lo ves y no le cuesta. Es perfecto. Lo que hace, cómo corre, cómo juega. Lo más espectacular que ha hecho este año para mí fue el Mundial. No estaba ese día en casa, me puse los últimos 50 kilómetros y tuve que echar el Eurosport para atrás para entender qué había pasado y poder disfrutar de lo que hizo. No me entraba en la cabeza que pudiera hacer aquello”.