Santana Motors se apunta al Dakar con Jesús Calleja

No pilla por sorpresa saber que, cuatro años después de la última vez, el Dakar tendrá entre sus participantes a Jesús Calleja. Pero a pesar de que el presentador anunció su regreso al mítico raid durante el pasado verano, en esa puesta de largo faltaban detalles por desvelar que ya han salido del tintero. Y es que para su vuelta al desierto, el español se codeará con los aspirantes de la categoría reina junto a un equipo oficial: el Santana Motors. La marca española será la segunda representante nacional en carrera a nivel de escudería, después del anuncio de Ebro junto a Laia Sanz. Y al mismo tiempo pondrá en manos del leonés “el mejor coche que he probado en mi vida”.

Calleja repite una y otra vez las capacidades de un prototipo que ha sido modificado por Santana Motors. El Century CR7 T1+ con el que participará en carrera junto a Edu Blanco (CEO de la marca), ha adoptado la imagen del nuevo todoterreno de la marca, el Santana 400. Pero por mucho que pueda recordar a un coche de producción, la realidad de este vehículo es que se trata de un coche de carreras que se medirá frente a Ford, Dacia o Toyota en la carrera más dura del mundo. Y por lo tanto, el presentador de televisión le exigirá a la máquina todo aquello que se espera de un modelo de competición.

Lo hará con los pies en el suelo, consciente de que por delante se enfrenta a "40 pilotos entre los veteranos y los jóvenes que son intocables" en el Dakar. Pero no por ello le exigirá menos a un prototipo con el que se enfrenta a dos desafíos personales: llegar a la meta del mítico raid y mejorar la 29ª posición en la que finalizó la edición de 2020. Sobre el papel, tiene coche para poder conseguir sus objetivos. Pero sobre el terreno, Calleja se enfrentará a la mayor inscripción de T1+ que ha presentado la carrera desde que desembarcó en Arabia Saudí. Y aunque será “difícil asomar la carrera ahí arriba, corro en un equipo oficial y nunca me habría imaginado que se pudiera ir así con un coche”.

“Parece que estoy ahora en un coche que está años luz de aquel Toyota que yo llevaba, que ya era un pepino. Pues esto está años luz, esto es una barbaridad y voy con esa ilusión de hacer un Dakar con un pedazo de pepino que es una bestia", insiste Calleja, sobre el arma que le llevará sobre un desierto para el que también surgen los interrogantes. “No sé a qué nivel estaré después de cuatro años fuera y para mí, las primeras etapas del Dakar serán como un entrenamiento para acabar de entender el coche e ir más fuerte. Tengo que pulirme y creo que este Dakar será para pulirme la técnica de conducir y hacer un mejor Dakar la próxima vez”, explica, dejando clara su ambición de regresar al desierto.

“Tengo más botones que Alonso en el volante”

Hasta entonces, por delante el desafío junto a un Edu Blanco que no solo hará de copiloto sino también de amigo “y eso ayuda muchísimo”, Calleja se enfrentará a “un Dakar de eliminación” en el que la estructura española solo pretende sobrevivir. Para poder hacerlo contarán con el mismo material y apoyo que los pilotos oficiales de un Century donde “es increíble todo lo que se puede regular en el coche”: “Tengo más botones que Fernando Alonso en el volante, me tendré que estudiar el manual estos días”, bromeaba el leonés, sobre un desafío que comienza su cuenta atrás.

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