Rossi no cumple sus expectativas
El italiano, que ha participado en la GT World Challenge Europe Endurance Cup y el WEC, asume que “esperaba más de la temporada”, aunque haya sido “buena”.
Valentino Rossi pone fin a otra temporada de competición. Hace ya unos años que sus carreras pasaron de las dos a las cuatro ruedas, pero sea como sea, al italiano le hace falta su dosis de adrenalina para poder vivir. Por ello, este año, el nueve veces campeón del mundo ha vuelto a formar parte de la GT World Challenge Europe Endurance Cup, pero no contento con ello, también participó en el Mundial de Resistencia (WEC) de la FIA. Un nuevo reto que le llevó hasta las 24 Horas de Le Mans, donde un accidente le dejó fuera de la lucha por todo. Y, aunque la cita francesa fue un duro golpe para Rossi, no es lo único que marca una temporada de la que se “esperaba más”, sobre todo siendo piloto oficial de BMW en el equipo WRT.
Al menos, su adiós a la temporada le dejó un buen sabor de boca para encarar el invierno. La última cita, celebrada en Jeddah y con una duración de seis horas, dejó para la historia una de las mayores remontadas jamás vistas. Al volante de su BMW M4 GT3, junto con sus compañeros Maxime Martin y Raffaele Marciello, el italiano remontó desde la 23ª plaza para acabar quinto gracias a la gran evolución que fueron haciendo durante el fin de semana. “Fue una carrera muy buena para nosotros, porque comenzamos desde la P23 y terminamos entre los cinco primeros. Luchamos por el podio en la última vuelta. Creo que trabajamos muy bien este fin de semana y logramos mejorar”, indicó Il Dottore al final de la cita, que marca el inicio de sus vacaciones.
Por eso, toca hacer balance de lo que ha sido este 2024. Valentino ha terminado noveno en el GT World Challenge Europe Endurance Cup y, aunque parezca una posición muy atrasada, lo cierto es que contó con opciones reales de título hasta esta última cita final. Además del WEC, Rossi también participó en algunas carreras del GT World Challenge Europe Sprint Cup y, de toda la temporada, su victoria en Misano, su trazado de casa, podría ser el momento más emotivo de todo su año. Pero es crítico con sus actuaciones y, siendo campeón del mundo, siempre quiere más: “En general, esperaba más de la temporada, especialmente porque nuestra formación con Raffaele Marciello y Maxime Martin es fantástica. A menudo tuvimos buen ritmo, pero también sufrimos algo de mala suerte. Tuvimos buenas carreras, ganamos, logramos podios, pero no alcanzamos nuestro objetivo principal de conseguir un podio en una carrera de resistencia. Aun así, fue una buena temporada”.
Y ahora, aparte de descansar, el italiano tendrá que decidir qué pasará con su futuro dentro de la competición. Hace unos meses habla de la necesidad de acortar su calendario, con un segundo bebé en camino y la intención de pasar más tiempo en casa, evitando tantos viajes como los que hacía cuando era piloto de MotoGP. Por lo pronto, y sin nada aún concreto, solo sabe que seguirá siendo piloto oficial de BMW: “No sé qué me espera el próximo año. Quiero disputar entre diez y once carreras, pero aún no sé dónde. Mi objetivo es comenzar en Bathurst en febrero, y luego decidiré el resto del calendario junto a BMW”.