Las espeluznantes imágenes de la riada: “Ha sido horrible”

Hay días que nunca se olvidan y puede ser que, para muchos pilotos, esta tercera etapa forme parte de ellos. La lluvia que cayó en Ha’il dejó un escenario peligroso que visto en imágenes, ponía los pelos de punta. Nadie contaba con un transcurso ni siquiera parecido, a pesar de que las predicciones avisaban del agua. Cayó con fuerza en el vivac pero también lo hizo fuera de él, afectando a un recorrido que tuvo que ser neutralizado a los 377 kilómetros de los 447 programados inicialmente. A partir de ese momento los pilotos debían tomar un camino alternativo al que marcaba el roadbook para regresar al campamento, pero antes se encontraron con una riada que complicó mucho la tarea.

El río se formó por la dirección natural que cogió el agua, e irremediablemente, circulaba con bastante fuerza hasta el punto, de crear momentos de verdadera tensión: side by side prácticamente tapados por el agua, camiones que superaban con dificultades el tramo y pilotos a los que arrastraba el caudal y necesitaron ayuda para poder escapar de él. Las imágenes que mostró el Dakar ya ponían en contexto todo el peligro que hubo a la hora de atravesar esa zona que retuvo a muchos vehículos. Necesitaron de asistencia y el tiempo se hizo eterno dentro de una situación en la que Cristina Gutiérrez permaneció atrapada casi una hora.

La burgalesa tuvo que batallar para salir del cauce. Su Can-Am encalló una rueda a la orilla del río que se formó y desde el entorno clasificaron el momento como “horrible”: “Ha sido muy peligroso. No podía salir y parecía que iba a volcar”. La propia Cristina compartió posteriormente imágenes en sus redes sociales y dejó claro que estaba sin palabras: “Hablad por mí, porque yo no puedo”. Tuvo que luchar mucho para conseguirlo y por si fuera poco, también su compañero Chaleco López pasó uno mal pago. Aunque el peor, con la riada crecida, lo vivió el copiloto del chileno. Latrach trató de avanzar a por sus medios e incluso llegó a perder el casco, en un momento donde resultaba imposible mantenerse en pie. El agua le envolvía con dureza y vivieron una pesadilla que afortunadamente, no pasó de ahí.