“Esto es el Dakar, si no, vamos a correr un Scalextric”
Isidre Esteve visita AS tras una edición que a pesar de los abandonos, “no fue extrema”. “Volveremos con mejores armas para ser competitivos”, afirma.

No hizo falta que comenzara el Dakar, para que desde la organización dejasen claro que por delante esperaba una carrera de resistencia, en la que Isidre Esteve (52 años, Lleida) vivió su propia dificultad durante las primeras jornadas de la edición. “El primer día cogí una gripe estomacal y me quería morir. Estoy todo el año entrenando a tope y pasé tres días fatal. Todo el día tenía ganas de vomitar, no me permitía correr en el especial, no me permitía dormir bien... Hasta que un día fui al Centro Médico, que cuando vas es porque ya no sabes qué hacer. Había que estabilizar el tema de las náuseas, estuve un rato allí, salí y al cabo de una hora y media estaba bien. Se me había pasado”, relataba el español, sobre un contratiempo que fue lo más complejo a lo que se enfrentó durante las dos semanas de competición. Porque “este Dakar no ha sido difícil”.
En su visita a AS, Esteve es rotundo a la hora de hablar sobre cómo ha sido una edición que para muchos fue compleja; mientras que el español la ha vivido desde otra perspectiva: “Ha habido acumulación de kilómetros y pocas horas de asistencia de los mecánicos en los coches. ¿Qué ha ocurrido este año? Hay cinco marcas, hablamos de los coches, y siete pilotos, que quieren ganar el Dakar. Que solo les sirve ganar. Entonces, ¿qué quiere decir esto? Que el primer día, el pie con plancha. Y a consecuencia de ello han llegado los errores. Pero no estamos hablando de algo extremo, la intensidad de la carrera ha sido superior, pero no ha habido una gran dificultad técnica. Al final esto es un Dakar, si no, vamos a correr un Scalextric”. Esos errores a los que hace referencia el piloto del Repsol Toyota Rally Team dejaron fuera de carrera a Laia Sanz, Carlos Sainz y Sébastien Loeb, a causa de una deformación en el chasis que desató la polémica en el vivac. Aunque para Isidre, las reglas son las reglas.
“Sobre esta polémica de las barras... es que no hay polémica. No la hay. Hay un reglamento que dice que la estructura del coche no se puede dañar. Puedes cambiar todo. Ahora abandonar el Dakar es muy difícil. El único tema por el cual tú abandonas el Dakar es una variación de la estructura del coche o que te hagas daño. Y es lo que ha pasado. Igual no vuelve a pasar en diez años. Es como cuando hubo tantos accidentes en moto, que desgraciadamente la gente se empezó a morir y parecía que esto no tendría freno. Son como ciclos en los que ocurren cosas, pero ya está”, opinaba el español al respecto, sobre una norma que entró a la carrera con la llegada de la FIA (2022): “Lo que tienen que hacer los equipos a 31 de enero es cambiar este apartado del reglamento. Y se habrá acabado el tema. La FIA es la policía, pero en el Dakar, en el WRC... en todas partes. Y el reglamento es el mismo para todos”.
Polémicas aparte, los abandonos prematuros de varios favoritos fueron “buenos para la competición”, según Isidre: “No veo, por ejemplo, a Baciuska o a Seth Quintero ganando el Dakar el año que viene. Pero sí los veo ganar etapas y poner ambiente a este tema. Y luego que gane el más regular. Yo me alegro un montón de estos cambios y de las nuevas generaciones. Que llegue Lategan y sea competitivo, que llegue Ekström y sea competitivo... Es decir, que no esté la misma gente de siempre delante a la que parece que no podemos mover de allí, con todo el respeto hacia Carlos (Sainz). Ahora, no todo es tan predecible. No es Sainz, Loeb y Nasser (Al Attiyah). También hay unos chavales jóvenes que van a fondo”.
“Ford ha hecho un buen trabajo”
“El Dakar a nivel deportivo ha tenido todo lo que tiene que tener”, para un Esteve, que de entre los recién llegados aplaude el trabajo de Ford: “Chapó por Ford, que viene con un coche nuevo, que ha hecho cuatro días en Marruecos y que está en el podio. Han hecho un buen trabajo, suena bien y es un coche rompedor: todos con V6 biturbo y ellos con V8, todos con Raider y ellos con Fox (suspensiones)... está muy interesante el trabajo que han hecho”. Aunque el español se fija especialmente en Toyota y el futuro que le espera en la carrera junto a un Hilux, con el que volverá “mejor y con mejores armas para ser más competitivos”. Porque a pesar de los problemas de salud y algún contratiempo en carrera, para Isidre “el resultado al final (32º) es bueno”, ahora quiere dar un paso más allá: “Cuando vuelva a competir, lo haré con un mejor coche y un mejor equipo”, adelanta el español, sobre un salto de calidad que llegará tras haberse demostrado que “puedo ser más competitivo y voy a intentarlo”.
“Mi máximo objetivo es ganar una etapa. El año que viene vamos a luchar para otro tipo de resultados, que son los que creo que ya nos toca hacer. Mi camino ha sido quizás un poco más lento que el de algunos pilotos porque... esto casi no lo he dicho, pero mis circunstancias han hecho que yo no me creyera que puedo hacerlo. Tras lo que me ocurrió he visto como una oportunidad increíble el correr en coches, pero no me veía capaz de luchar para competir. Y ahora he visto en estos dos últimos años que lo puedo hacer”, se sinceraba Isidre, que también habla desde la realidad: “Ganar el Dakar es otra cosa. Hay que ser regular, el equipo tiene que estar muy unido, hay que trabajar muy bien, hay que hacerlo todo muy bien a nivel de equipo y de estructura para ganar un Dakar. Pero ser competitivo una vez tienes la confianza para ir rápido y tienes el buen coche... ¡Vamos allá!”.
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