El futuro del Dakar, en juego

No hay que esperar a que comience el Dakar, para empezar a señalar favoritos. Si algo tiene el Rally de Marruecos (del 6 al 11 de octubre), es esa capacidad de recrear un escenario lo más parecido posible a lo que los pilotos se encontrarán el próximo mes de enero en Arabia. Y de ahí, que la última prueba del Mundial W2RC, esté considerada como un Dakar abreviado que en esta ocasión se presenta con muchos interrogantes. Por lo que el futuro, está en juego a partir del próximo domingo.

Para empezar, Dacia y Ford harán su debut en la competición y tendrán que valorar su potencia frente a los que ya acumulan experiencia, como Toyota (con sus dos pilotos oficiales) y Mini (donde se estrenan Chicherit y de Mévius). Pero además, los dos títulos más importantes siguen huérfanos a la espera de una última ronda, que decidirá los ganadores y la jerarquía de la próxima temporada.

Antes de otorgar méritos, los pilotos y las mecánicas deberán superar 2.468 kilómetros (divididos en cinco etapas), de los cuales 1.512 serán cronometrados. Por primera vez, Carlos Sainz se enfrentará al desierto junto a Lucas Cruz a los mandos del nuevo Ford Raptor. Después de unos “buenos test” en el territorio africano donde acabó de adaptarse al nunevo prototipo de la marca del óvalo, el último ganador del Dakar debe comprobar dónde se encuentran en el primer año de un proyecto ambicioso, pero realista. El madrileño liderará la expedición española (representada también por Isidre Esteve, Pau Navarro, Daniel Alonso y Nandu Jubany) y competirá en igualdad de condiciones con un Ekstrom, al que también se le ha encomendado la misión de afinar una máquina que en Marruecos, tan solo se verá en escena con dos de sus cuatro pilotos confirmados ante la ausencia de Roma y Guthrie.

Quien sí llega con su elenco de pilotos al completo es otro de los debutantes. Dacia se estrenará con Loeb, un Al Attiyah que además se juega el título mundial de pilotos frente a Al Rajhi (el qatarí tiene 25 puntos de ventaja a su favor) y una Cristina Gutiérrez que junto a Pablo Moreno, se abre paso entre los grandes. La española estrena coche y categoría tras ocho años de evolución. A su disposición tendrá un SandRider sobre el que debe valorar su potencial y junto al que vivirá un momento especial: “Será nuestra primera carrera después de mucho test y además, será mi primera carreta en la nueva categoría tras el salto. Tengo presión, pero es una presión positiva, la que te hace dar lo mejor de tí mismo. Será una carrera de preparación para el Dakar, pero espero poder conseguir un buen resultado... y divertirme”.

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Última oportunidad para Honda

Con el título de fabricantes en la palma de su mano (tercero consecutivo), Honda tendrá que poner todo de su parte para firmar el doblete conquistando también el campeonato de pilotos. A pesar del dominio absoluto por parte del fabricante japonés en las cuatro pruebas anteriores del Mundial, en lo más alto de la tabla aparece el nombre de Ross Branch. La regularidad ha sido la mejor aliada del piloto de Hero, que busca la corona frente a un Brabec que está a solo nueve puntos y es la mayor amenaza del botsuano; mientras que Van Beveren, también en la pelea y a 16 puntos de la primera posición, tienes algo más complicado el asalto al trono. Aunque las matemáticas le siguen manteniendo con vida.

Marruecos será una pelea a tres bandas en clave de título. Porque más allá de la lucha por el Mundial, el triunfo de este rally también está en juego y Tosha Schareina quiere despedir la temporada por todo lo alto. El valenciano, que no será la única baza española ante la participación de Santolino, llega como flamante Campeón del Mundo FIM de E-Xplorer, intentará redondear una temporada que empezó marcada por el infortunio, pero todavía deja margen para celebrar.