Da Costa se aleja de Porsche

Los dejaron encaminados el sábado con la primera carrera en Londres y los certificaron el domingo. Porsche se alzó con los títulos de equipos y fabricantes que quedaban en juego y cumplieron con el objetivo que se marcaron para acabar la undécima temporada de Fórmula E. Tanto Pascal Wehrlein como Antonio Da Costa tenían claro que debían de apartar a un lado sus prioridades personales y poner por delante las del equipo. AS habla con el portugués para hacer balance de la temporada.

Feliz por haber conseguido poner “una sonrisa en las caras de la gente del equipo” con esos dos campeonatos, Da Costa (5⁰ del Mundial) lamenta haber acabado sin poder celebrar una victoria por primera vez en siete años: “He sido capaz de ganar una carrera en los últimos seis años y este no he podido, pero creo que ha sido una temporada sólida. Hemos sido consistentes en clasificación y carrera, pero he tenido algún error aquí y allá, un poco de mala suerte al echarme de un par de carreras…”

Así que no está “contento al cien por cien” con su año porque “no ha sido suficiente para luchar por el título”. Ese se lo ha llevado Oliver Rowland, “un merecido campeón” con el que se ha vuelto a poner de manifiesto que en la FE no existen periodos largos de dominio como en otros sitios. “Es un campeonato muy competitivo, los coches son todos muy parecidos, es muy difícil de dominar y eso es bueno para los fans. Nunca se sabe quién va a ganar la carrera o ser el campeón”, analiza el portugués.

Eso lo ha demostrado este Mundial a lo largo de los años, lo que no está nada claro es por dónde pasará el futuro de Da Costa. Por sus palabras, parece difícil que siga siendo por Porsche: “Todavía no lo sé al cien por cien, tenemos un par de opciones e ideas que podemos hacer. Me gustaría mucho volver también al WEC y combinar los dos campeonatos al mismo tiempo, eso será una prioridad en las próximas semanas y a ver dónde conseguimos hacerlo”. Ofertas no le faltan.

Wehrlein le quiere a su lado

Al contrario de lo que pudiera parecer tras ver como su relación se ha ido torciendo después de tres años juntos, como demostró un toque innecesario entre ambos en unos libres en Berlín, si fuese por Wehrlein le gustaría que Da Costa siguiera en Porsche. “Los dos primeros años tuvimos una gran relación y aprendí mucho de él, pero este año no es un ningún secreto que ha sido un poco más difícil. Mientras tengamos un trato profesional en la pista está bien. ¿Si quiero que siga en el equipo? Sí. Es un buen piloto, pero lo que decida él o el equipo para mí estará bien”, comenta el alemán.