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DAKAR | EL PERFIL

Carles Falcón: de la pantalla a la vida real

Ingeniero informático de profesión, llevó a cabo una revolución en su vida que junto a su gran amigo Feliu, le llevó a cumplir el ansiado sueño del Dakar.

Ha'il (Arabia Saudí)Actualizado a
HAIL (ARABIA SAUDÍ), 15/01/2024.- Fotografía de la cuenta de Instagram del motorista catalán Carles Falcón que falleció este lunes a consecuencia de las heridas sufridas el pasado domingo día 7 al caerse en la segunda etapa del Dakar, una caída por la que tuvo que ser reanimado por los servicios médicos de la prueba tras perder el pulso. El equipo TwinTrain Racing Team explicó este lunes en un comunicado que los daños neurológicos causados por el paro cardiorrespiratorio en el momento del accidente" eran "irreversibles", después de que el piloto sufriera un edema cerebral y se fracturara la vértebra C2 en la caída, además de fracturarse cinco costillas, la muñeca izquierda y la clavícula. EFE/ IG Carles Falcón SOLO USO EDITORIAL/ SOLO USO PERMITIDO PARA ILUSTRAR LA NOTICIA QUE ACOMPAÑA/ (CRÉDITO OBLIGATORIO)
IG Carles FalcónIG Carles Falcón/EFE

No fue protagonista de ningún videojuego, pero la vida de Carles Falcón (45 años, Tarragona) transcurría durante más de ocho horas al día delante de una pantalla. Se trataba de un informático apasionado de las motos que se reinventó para cumplir sus sueños y cambió la pantalla por la vida real. Fue un giro radical que tuvo su pasión por las motos como gran culpable y después de cientos de rutas con el mismo grupo de trail, decidió en 2015 junto a su amigo Isaac Feliu crear una tienda de productos de trail (TwinTrail, nombre que recibía el equipo) que daba la opción de realizar viajes y cursos de conducción off-road.

El español tuvo tiempo de compaginar su rutina con su pasión, pero cansado de la informática decidió darse una oportunidad para dedicarse plenamente a aquello que le hacía feliz. Falcón era un privilegiado que soñaba con el Dakar y aunque la empresa se vio congelada con la llegada de la pandemia, aquel que ya había dado un giro radical a su vida era capaz de reinventarse y mucho más. A raíz de la COVID-19 crearon un programa semanal en YouTube donde conocieron a otros apasionados como ellos. Y esta historia se cuenta en plural, porque Feliu siempre formó parte de ella.

Con el apoyo de sus seguidores y una campaña de crowfunding cumplieron el sueño del Dakar. En 2022 llegaron tres mosqueteros (Albert Martín completó la alineación del equipo) al desierto de Arabia Saudí sin asistencia a la categoría Original y mientras que Feliú acabó colgándose la medalla de finisher, Isaac acabó en el hospital con un coma inducido del que pudo recuperarse tras una caída en la etapa 9 con una única secuela: no recordaba haber pasado por el Dakar. Y por eso habían vuelto a la carga. Estos dos amigos tenían una tarea pendiente, pero se acaba antes de tiempo con Carles “disfrutando y siendo feliz encima de la moto”.

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