Álex Palou es tricampeón de la Indy
El español se lleva su tercera Copa Astor en una carrera que se decidió pronto por un problema de Will Power a las 15 vueltas.
Iba a ser un mano a mano en la distancia, una carrera de Álex Palou contra Will Power por la Copa Astor que se entrega al campeón de la IndyCar. El español tenía antes de comenzar las 206 vueltas al óvalo de Nashville dos trofeos, los de 2021 y 2023. Los mismos lucían en las vitrinas del australiano, con sus campeonatos de 2014 y 2022. Luchaban por desempatar y auparse al tercer puesto de pilotos con más campeonato, empatando con los tres de Sam Hornish Jr. (en la era Indy). Y como en los combates de boxeo, el pleito acabó antes de tiempo. A las 15 vueltas Palou ya era virtualmente campeón porque Power besó la lona al tener que entrar en boxes con un problema en sus cinturones de seguridad. El incidente le hizo perder cuatro vueltas y entregó el campeonato. KO por la vía rápida.
La pelea comenzó con 33 puntos de ventaja para el de Ganassi pero con una peor posición de salida en la parrilla: 24º. El de Penske arrancaba mucho más adelantado, cuarto. Y ambos tenían un objetivo común, remontar, escalar posiciones. Porque si el barcelonés no quería depender de lo que hiciera su rival debía llegar al noveno, mientras que el de Queensland estaba obligado de facto a ganar. Porque si quedaba segundo a Palou le valía un 18º, y si acababa 3º a Álex le valía con salir. Y si acababa fuera del podio, se acabó, Palou sería campeón. Por tercera vez.
Y se acabó pronto, a pesar de que la carrera se presuponía larga y la batalla, tensa. Como decimos, realmente duró 15 vueltas, las que tardó en entrar Will Power en entrar a boxes con sus cinturones de seguridad sueltos. El tiempo que perdió el australiano en reponer la avería fue un mazazo para el equipo Penske y supuso despedirse de cualquier opción de ganar el campeonato. A su vez, fue una red de seguridad increíble para Álex Palou. Cuando el coche ‘12′ regresó a la pista lo hizo con cuatro vueltas perdidas, y el mensaje para el español desde su muro fue claro: suavidad, que traducido venía a decir evitar problemas. Fue un golpe de fortuna en toda regla y esta vez el beneficiado fue el monoplaza ‘10′ de Chip Ganassi. De golpe y porrazo toda la mala suerte que tuvo Álex en Milwaukee con ese fallo en la batería nada más comenzar la carrera viajó a Power.
Solo una hecatombe podía apartar el español de proclamarse tricampeón. No se arriesgó en el tráfico, ni con los doblados, y su muro no tuvo que buscar fórmulas alternativas para lograr esa remontada, ya no hacía falta acabar noveno. Valía con acabar por delante del australiano. Controlarlo en la distancia enorme de cinco vueltas perdidas, que iba recuperando con las sucesivas banderas amarillas.
Había carrera, pero no campeonato. Por delante, Newgarden quería darle una alegría a Penske tras el infortunio de su compañero. Y también querían visitar el último victory lane, Kirkwood, Malukas, Herta, McLaughlin, O’Ward... Pasaban las vueltas, pero Power no recuperaba, solo iba adelantando a los coches que iban abandonando. Además, perdía incluso el subcampeonato y la tercera plaza de los puntos, en favor de Colton Herta y Scott McLaughlin. Mientras Palou viajaba en el medio del grupo en una de las carreras más plácidas que haya podido tener. Sin presión llegó a ponerse segundo en las últimas diez vueltas, buscando una bandera amarilla que le diera la primera victoria en un oval. Pero no era lo primordial. El destino final era ver la bandera a cuadros, la vio en una magnífica 11ª posición y amarrar el tricampeonato. Que tampoco hubiese hecho falta finalizar, porque la única posibilidad de Power era llegar al segundo puesto o a la victoria, que fue para Colton Herta, que además fue subcampeón. Pero eso era lo de menos, como le dijo su ingeniero. lo importante es que había campeón. O mejor dicho, tricampeón: Alex Palou Montalbo, quien entró en meta gritando explotando de alegría: “No me he podido relajar mucho, nos hemos mantenido, hemos seguido trabajando en el coche número 10″, contestó cuando le preguntaron si había sido una carrera fácil. En la entrega de la Copa Astor, agradeció el trabajo de su equipo: “Lo hemos logrado con estos chicos y con todo el grupo, aquí en la fábrica... Les agradezco haber podido lograr el título. Lo hemos logrado a pesar de que se puso difícil. Hemos maximizado en todos los sitios y hemos estado cerca de una victoria en un oval”.