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FÓRMULA 1

Hans Zimmer y la esencia de la F1 en una banda sonora

El compositor alemán interpretó el himno de Austria antes del gran premio. “No escribo por los coches, sino por el espíritu y el drama de los pilotos”.

Spielberg
Hans Zimmer en el podio del GP de Austria. F1 2024.
MAX SLOVENCIKAFP

No todos los países se permiten las mismas licencias a la hora de hacer sonar su himno nacional antes de un gran premio de F1. Austria puede parecer un país de orden y puntualidad, pero en Red Bull Ring encargaron que el arreglo de su himno lo ejecutase el compositor de bandas sonoras Hans Zimmer (con dos premios Óscar por ‘El rey león’ y ‘Dune’, entre otros muchos éxitos como ‘Gladiator’, ‘Interstellar’, ‘Origen…). El músico alemán firmó la partitura de ‘Rush’, que cuenta la historia de la rivalidad entre Lauda y Hunt, y revela a AS que también se encargará de la película sobre F1 que ha producido Apple y que se presentará el 25 de junio de 2025: “Justo ahora estoy en el proceso de una película de F1 con Brad Pitt y Lewis Hamilton (productor)”.

Sobre su manera de trasladar el sonido de los monoplazas a la música, confiesa que le interesan más los pilotos: “No es fácil, porque los coches suenan muy fuerte. Al final, no escribo por los coches, escribo por los pilotos. Por el espíritu, el corazón, la adrenalina, el público, la emoción, el drama… los coches son mis enemigos porque suenan muy fuerte”. Luego concreta: “Será electrónica y una guitarra como la de Brian May (Queen)”.

El músico Hans Zimmer, en los ensayos del himno nacional de Austria durante el gran premio de Fórmula 1.
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El músico Hans Zimmer, en los ensayos del himno nacional de Austria durante el gran premio de Fórmula 1. ERWIN SCHERIAUAFP

En cuanto a su aportación a la hora de reinterpretar el himno austriaco: “No es un himno cualquiera, es Mozart. La mayoría de países tienen compositores malos en sus himnos nacionales, ¡pero los austriacos tienen a Mozart! Mi madre era una verdadera aficionada, y el respeto es enorme. Pero yo quería que fuera divertido, podemos introducir a Mozart a gente que nunca le ha escuchado”.

Entre los atrevimientos, alteró el compás de 3/4 tradicional: “Era muy importante porque parecía más apropiado para la tecnología que tienen los coches ahora mismo. Soy amigo de un piloto, son superhéroes y disponen de una tecnología inmensa en sus coches. Así que ir a un compás de cuatro por cuatro permitía ser más electrónico… aunque quizás después de la actuación tengo que marcharme del país (bromea)”. Lo ejecutó con más de 50 músicos, en su mayoría jóvenes y locales: “Yo quería que la gente pudiera participar. No necesitas ser el mejor músico, basta con tener ganas y que sea divertido. No diría lo mismo a la hora de subir a un F1, no te subas al coche solo para ver si es divertido (risas)”.

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