El duelo de McLaren se tensa con la sombra de Verstappen
Piastri tiene 22 puntos de ventaja sobre Norris que serían cinco sin la avería de Zandvoort. Woking no quiere interferir… pero Max acecha.
Todas las carreras reparten los mismos puntos, pero los títulos se deciden en esta fase de la temporada. El estrés y la congoja arrecian, las levas del embrague resbalan en cada salida y el tacto del freno se vuelve extraño. Entonces, los buenos pilotos ven cómo se escapan los grandes pilotos. En ese contexto Norris perdió el Mundial de 2024, agarrotado frente a la versión más agresiva de Verstappen. Y ahora lucha por el de 2025 contra su compañero de equipo, con todas las implicaciones que eso tiene en cuanto a gestión de riesgos. Piastri lidera con 22 puntos sobre Lando y quedan 174 en juego. Max es el tercero en discordia a 63 puntos del australiano.
El GP de Estados Unidos, este fin de semana, reparte ocho puntos extra por el esprint. Habrá tres carreras cortas en los seis últimos grandes premios (Austin, Sao Paulo y Qatar), es un recurso de la F1 para asegurarse de que el campeonato llega abierto hasta el final, aunque en esta campaña no lo hubieran necesitado. A lo largo de 2025, la mayor ventaja de Norris fue de 23 puntos en Australia (porque Piastri se salió de pista y acabó noveno) y la de Oscar ascendió a 34 puntos en Holanda tras la avería de motor del inglés.
Más allá de eso, en la pista no hubo grandes diferencias de rendimiento. Piastri fue más sólido en el arranque, Norris resurgió en Mónaco y mantuvo el pulso durante el verano. Sin la rotura de Zandvoort estaría a cinco puntos del liderato, así que no sería justo señalarle como el McLaren más débil. De hecho, le sobró carácter para lanzar el coche en la primera curva de Singapur y adelantar al líder con toque y enfado incluido. En momentos de máxima brillantez, puede decirse que Lando tiene más que ofrecer. Pero la regularidad y escasas desconexiones de Piastri (solo en Azerbaiyán, con dos accidentes) le mantienen por delante.
McLaren ya aseguró en Singapur su décimo Mundial de constructores y el objetivo ahora es dar libertad máxima a sus dos pilotos con una consigna: uno de ellos debe ganar el título. Y ahí radica la mayor incógnita: si Verstappen se acerca peligrosamente, ¿tratarían de defender exclusivamente los intereses de uno de ellos? Stella, jefe de la escudería por ahora hace encaje de bolillos: “Debemos ser precisos porque hay mucho en juego. No solo los puntos, también la confianza de nuestros pilotos y nuestra manera de trabajar como equipo. Queremos proteger esta idea de dejarles competir y sabemos que nos enfrentaremos a alguna dificultad”. Ya frenaron a Piastri en Monza para compensar un pit-stop lento de Norris, pero en Marina Bay fue Oscar quien sufrió un mal cambio de ruedas, y un toque de Lando, y nadie se paró a esperarle.
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No obstante, la apretada lucha entre los McLaren perderá su sentido si Verstappen es capaz de entrometerse. El holandés ha recortado puntos a McLaren en las últimas tres carreras y no se ha bajado del segundo puesto desde el parón de verano, con victorias en Monza y Bakú. El suelo que introdujo Red Bull en Italia ha llevado al coche a una nueva dimensión. No es superior a McLaren, pero sí capaz de competir, y vienen circuitos del corte de Max: ganó en Austin y México ininterrumpidamente en 2021, 2022 y 2023. No es fácil, aunque venciera todas las carreras americanas, si Piastri fuera segundo apenas recortaría 30 puntos. Habría hecho solo la mitad del trabajo antes de Qatar y Abu Dhabi. Pero si los McLaren se restan puntos mutuamente y Verstappen mantiene el nivel, el quinto puede dejar de ser una ensoñación.
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