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F1 | ECCLESTONE

Ecclestone, en estado puro

DAZN emite ‘Lucky!’, una serie documental de ocho capítulos que repasa la larga relación que tuvo con la F1 el británico de 92 años.

Bernie Ecclestone.
SUSANNAH IRELANDAFP

Actualmente, DAZN emite Lucky!, la serie documental sobre Bernie Ecclestone, uno de los personajes más controvertidos en la historia de la Fórmula 1, creada y dirigida por Manish Pandey (escritor de la película Senna) en la que se repasa la vida del británico de 92 años y su relación con el Gran Circo a través de una serie de entrevistas realizadas en 2020 y 2021. Compuesto por ocho capítulos, se estrena uno cada viernes, echamos un vistazo al primero para ver qué depara la serie y, conociendo al personaje, promete.

‘Forjado en la guerra’, así se titula el primer capítulo en el que Ecclestone se sienta ante la cámara para repasar cómo fueron sus primeros contactos con la F1, deporte que gobernó durante más de cuatro décadas y en el que estuvo presente desde su primera carrera en 1950. Acudió a Silverstone junto a su padre como un aficionado más, pasando la noche en el coche, síntoma de su pasión por el automovilismo en el que llegó a competir, en la F3 británica, pero pronto un accidente le llevó por otro camino. Su papel estaba fuera de la pista.

Sus primeros pasos en el Mundial fueron como mánager. Dos fueron las principales figuras que le marcaron en aquella etapa, Stuart Lewis-Evans y Jochen Rindt, y ambos perdieron la vida en las carreras. “Volví a mis negocios pensando que jamás volvería a involucrarme en ese mundo”, recuerda Bernie tras la muerte del inglés en 1958, y la del austriaco, en 1970, también le hizo alejarse un tiempo de la F1. Fue un golpe muy duro: “Al parecer estuve en su funeral, aunque ni lo recuerdo. Su muerte fue una gran pérdida para mí”.

Amenazado con una pistola

Antes de involucrarse en la F1, Ecclestone se dedicó, entre otras cosas, a la compraventa de coches de segunda mano y cuenta una anécdota de esa época que resume bien su carácter: “Una vez le compré un coche a un hombre y resulta que estaba financiado, no era el dueño, así que le anulé el cheque. El hombre se me presentó para decirme que quería que le hiciera un cheque y sacó una pistola de debajo del jersey. Le dije que no entendía que pretendía hacer con ella ya que si me disparaba no iba a poder cobrar el cheque. Conversamos, lo solucionamos y luego se convirtió en un buen cliente”. Puro Ecclestone.