Alonso: "Un día muy estresante"

La segunda etapa fue la que le alejó de la carrera, pero a pesar de perder entonces aquellas dos horas y media, Alonso considera que la cuarta ha sido la más difícil que ha corrido hasta ahora en el desierto árabe. El otro día tenía el ritmo de los mejores, esta vez le ha costado más al sufrir tres pinchazos con el Toyota en las numerosas zonas de piedras y en partes de navegación muy estresantes. Pero está "agradecido" por lo que está viviendo en el Dakar.

-¿Cómo valora esta cuarta etapa? ¿Ha costado encontrar el ritmo?

-Fue una etapa muy difícil. Complicada, larga… Salimos a las 7:45 del vivac y son las 17:00, así que son diez horas en el coche. En cuanto a sensaciones, bien, pero hemos perdido un poco de tiempo. Al principio dejamos pasar bastante rápido a Nasser (Al Attiyah) y a Yazeed (Al Rajhi) porque venían más rápido que nosotros. Luego tuvimos un pinchazo yendo tras Peterhansel. Íbamos un poco con el pie cambiado desde el principio y luego, a 150 km del final, pinchamos las dos últimas ruedas de repuesto que teníamos y tuvimos que llegar a meta despacio por un sitio de mucha roca y complicado. De Villiers también ha tenido tres pinchazos, Ten Brinke también… Así que ha sido una etapa muy complicada para todos.

-En su aprendizaje, otra vez día duro…

-Me falta mucho ritmo. Ayer lo decía, que no sé muy bien a qué velocidad tengo que ir en zonas con muchas pideras y hoy prácticamente la mitad de la etapa ha sido así. Era como si en el ciclismo eres un buen contrarrelojista y hoy era montaña. Así que sabía que me tocaría perder un poco, pero estoy contento de estar aquí, de no haber tenido ningún percance mayor. Dentro del aprendizaje es cierto que sí, pero mis dos compañeros llevan toda la vida haciendo raids y uno es ganador del Dakar e hizo 120 km sin ruedas también, así que es un poco por las características de nuestro coche. El buggy tiene una ventaja estratosférica en etapas como hoy porque pasan rectos y nunca pinchan, pueden controlar la presión (de los neumáticos) desde el coche, tienen cosas que nosotros no tenemos. En otro tipo de pistas y en la segunda semana cuando haya dunas, igual nuestro coche tiene un pelín más de prestaciones.

-¿Ha sido su etapa más complicada?

-Estoy contento porque ha sido un día muy estresante. Los 150 km sin repuesto se me hicieron interminables. Es la etapa más difícil que he hecho, sin duda. 10 horas en el coche, estresante en todos los sentidos por la navegación, los ríos secos llenos de piedras… A veces teníamos que respirar hondo los dos y tener que concentrarnos para seguir porque veíamos que mentalmente estaba siendo un etapa superexigente para todos.

-¿Cómo ha sido salir delante?

-Siempre quise salir ahí porque creo que dicta un poco el ritmo de la carrera. Vas en un tren rápido o en un tren lento, pero los ‘clientes’ que tenía por detrás eran los peores que podía tener: Nasser, Yazeed, Peterhnsel… Sabía que si sales delante con esos monstruos detrás incluso pierdes más tiempo porque los tienes que dejar pasar y luego quedarte tras su polvo. Así que bueno, intentando aprender un poco cada día y me voy contento de estar aquí.

-Tras un tercio del Dakar cumplido, ¿cómo valora su experiencia aquí?

-Bien. No tenía ninguna expectativa ni conocía nada de la carrera, así que no tenía ningún juicio a priori marcado de lo que iba a ser el Dakar. Lo estoy viviendo con intensidad, como debutante todo para mí es nuevo. Así que a absorber todo lo que va llegando con entusiasmo. Cualquier cosa y cualquier detalle lo vivo con plenitud y de momento ha sido muy completo. He tenido etapas buenas, malas, de pinchazos, de hacer de mecánico… Así que estos cuatro días han sido intensos en cuanto a experiencias y estoy agradecido.