Mercedes cambia de estrategia y no esconde sus cartas
Toto Wolff admite que están trabajando duramente en Brackley y Brixworth para solucionar los problemas de refrigeración padecidos en el Red Bull Ring.
Nublado con temperaturas máximas de 23 grados centígrados y una probabilidad de lluvia del 30%. Esta es la previsión meteorológica que se espera este fin de semana en Silverstone, circuito que albergará por 53º vez el Gran Premio de Gran Bretaña en el Mundial de Fórmula 1.
Como viene siendo habitual esta temporada, todas las miradas y focos volverán a situarse sobre el garaje de Mercedes. Y a diferencia de las carreras anteriores, los pentacampeones no ocultan que las características de la pista al sur de Northampton potencian los puntos fuertes del W10.
"El despliegue de potencia tal vez no haga tanta diferencia en las curvas rápidas, así que creo que Silverstone debería ser mucho más de nuestro agrado. Tal vez no tanto como Paul Ricard, pero mucho mejor que Austria", comenta Toto Wolff. Unas impresiones que también comparte Lewis Hamilton: "Hay algunos circuitos, aparentemente en los circuitos más cortos, donde Ferrari son realmente muy rápidos en las rectas. Nuestro coche debería de ser bueno en Silverstone, pero hay que asumir que estará ajustado".
Así mismo, Wolff confirma que los ingenieros de Brackley y Brixworth están trabajando duramente para mejorar la refrigeración del monoplaza tras los contratiempos padecidos en el Red Bull Ring: "Realmente espero el típico tiempo inglés en Silverstone para que podamos ganar un poco de tiempo y solucionar nuestros problemas. No hay otra alternativa que solucionar nuestros problemas para las próximas carreras calurosas, como Hockenheim y Budapest. No hay otra opción".