Loeb: "No he descansado ni un día desde el Dakar"
En su estreno con Hyundai, el francés asegura que "lo peor es el 'jet lag'. No va a ser fácil porque casi no hemos probado el coche y el rally es nuevo para nosotros".
No resulta nada difícil localizar a Sebastien Loeb en la asistencia del Rally de Montecarlo en Gap. Allá donde se ve una nube de flashes o una avalancha de aficionados persiguiendo un autógrafo, ahí está el nueve veces campeón del mundo, que en febrero cumplirá 45 años. Su estreno con Hyundai es el gran acontecimiento en este inicio de temporada.
—¿Por qué corre con Hyundai?
—Peugeot decidió retirarse del Mundial de Rallycross, algo que yo no esperaba. Yo no pensaba en otra cosa para 2019, ya que correr con ellos en rallycross era la 'vida fácil' para mí. Hice tres rallys el pasado año, y gané en España. Cuando tuve que decidir qué hacer este año, mi primer recuerdo fue esa victoria. No quería ir a circuitos, y al mismo tiempo me llamaron de Hyundai proponiéndome un programa de seis rallys. Yo no quería hacer todo el campeonato, y eso me cuadraba, así que acepté.
—¿Puede hacer más de seis rallys?
—No es el plan, y no hemos hablado de eso.
—Pero si acaba Suecia y es líder, ¿no decidirá seguir todo el campeonato?
—Esperaba esa pregunta, pero no hemos hablado de eso y no es nuestro programa. Por el momento sólo sabemos que vamos a hacer Montecarlo y Suecia, y posiblemente también Francia, pero el resto no está decidido.
—¿Qué le ha parecido el coche en su primera toma de contacto?
—He tenido buenas sensaciones. Es un coche fácil de conducir, y puedes jugar con el coche más que con el Citroën. El C3 se pilotaba más al estilo de un circuito, y el Hyundai se mueve más. No sé aún qué es mejor, pero es un coche divertido. En zonas rápidas sufre algo de subviraje, pero aún no tengo la solución.
—¿Va a ser fácil pasar del coche del Dakar al hielo? ¿Está cansado?
—No tiene nada que ver. El coche del desierto es más parecido a un camión, y el estilo de conducción es totalmente diferente. No estoy cansado de conducir, pero sí algo cansado por el 'jet lag' y porque no he tenido ni un solo día para descansar. Aterricé y me vine directo al test, y de ahí directo a los reconocimientos, pero no hay problema.
—¿Cómo ve el recorrido del rally?
—No conocía nada excepto diez kilómetros del Col de Turini. El resto es nuevo para mí, y no va a ser fácil. Soy consciente de que llego aquí en una situación complicada, sin descanso, con un coche nuevo que sólo he probado un día y medio, en un rally totalmente nuevo para mí, en el que con dos pasadas las notas no serán perfectas, pero voy a hacerlo lo mejor que pueda. Pero es Montecarlo, un rally en el que no es tan importante ir al límite, y quizás lo sea más mantenerse en la carretera y ser prudente en algunos sitios.
—¿Quién es su favorito para este rally?
—Yo, por supuesto. Es broma, porque mi prioridad será no salirme de la carretera, y no sé cuáles son nuestras posibilidades. Espero estar con los más rápidos, que supongo que serán los que iban rápido el año pasado: Ogier, Neuville y Tanak.
—¿Le ha recibido bien su viejo amigo Dani Sordo?
—Claro que sí. Hemos hecho juntos los reconocimientos. Hacía mucho tiempo que no éramos compañeros de equipo, y es bonito volver a serlo. Todo el mundo está muy motivado, y me gusta el ambiente que tenemos.