Honda ya sabe por qué falló el motor de Alonso en la Indy 500
"No digo que no tendremos más averías, pero no tendremos más veces esta avería", dice el responsable de competición de Honda en Norteamérica.
Difícil saber si Fernando Alonso habría ganado las 500 Millas de Indianápolis de no ser por la rotura de su motor Honda. Pero al menos habría luchado por la victoria, porque lideró casi 30 vueltas de la carrera y se mantuvo en la cabeza hasta que quedaban 21 pasos por meta, cuando cedió su mecánica. En Honda admitieron entonces que esperaban los problemas de fiabilidad en el motor más potente y más frágil de la Indycar y este viernes anunciaron que ya saben porqué sus propulsores fallaron en el óvalo de Indianápolis y en el resto de pruebas del campeonato norteamericano.
Art St. Cyr, presidente de Honda Performance Development, describe los recurrentes fallos en sus motores como "un problema en el procesado intermitente que no aparecía en las simulaciones provocado por un fallo en un componente microscópico que obviamente, no estaba previsto en el diseño". Y puntualiza en la página oficial de la Indycar: "No digo que no tendremos más averías, pero no tendremos esta avería nunca más". "Sucede en uno de cada ocho motores y cuando falla, normalmente falla pronto, el problema se muestra rápido", dice.
Sustituirán los motores Honda de sus coches progresivamente, según completen el kilometraje previsto. Y advierte St Cyr: "Cuando consigues más potencia también expones más partes a más estrés. Lo fundamental es que en este caso particular reducía nuestro factor de seguridad". Así que la división estadounidense de competición de Honda ya ha averiguado, aunque con un mes de retraso, por qué fallaban sus motores. La japonesa, que desde Sakura asume el desarrollo de las unidades de potencia de Fórmula 1, sigue trabajando en ello.