Mir triunfa después del caos y Canet le acompaña en el podio

Qué pocas veces decepciona la carrera de Moto3. La de Le Mans volvió a tener de todo, empezando por una multitudinaria caída de 16 pilotos en la curva 6 que encogió los corazones de los presentes pero que, afortunadamente, quedó en anécdota. Vino propiciada por una montonera de cuatro en la primera vuelta, tras la que Kornfeil regresó a la pista dejando un importante reguero de aceite. Así, al siguiente paso tras el puente de Dunlop, vino la hecatombe. Todos los implicados pudieron regresar a boxes y tomar parte en la segunda salida de una carrera programada a 16 vueltas, ocho menos que la primera. Mir, Bulega y Antonelli debieron pasar previamente por la clínica para recibir el OK médico, y menos mal que el español lo recibió, porque era su día…

El mallorquín consiguió después del susto inicial su tercera victoria de la temporada, una vez más como le gusta a él, con remontada. Partía octavo desde la parrilla, pero una mala salida le hizo rodar decimocuarto en los primeros compases. No se desesperó y en la cuarta vuelta ya era segundo, a base de adelantamientos de todo tipo, un ritmo de medio segundo mejor que la cabeza y la caída de Martín cuando marchaba segundo, cerca de Fenati.

A partir de ese momento el italiano era el único rival que le quedaba al líder de la general por delante y, tras varias vueltas en las que se mantuvo una diferencia de medio segundo a favor del primero, llegó el regalo del italiano en forma de caída. Sucedió en la novena vuelta y por delante le quedaban a Mir siete en la que gestionar una ventaja que llegó a ser de cuatro segundos en la línea de meta sobre un Canet que completó el doblete. Resulta curioso que fuera justamente el valenciano el que secundara al balear, porque Arón fue el ganador de aquella carrera de 2015 en el FIM CEV Repsol, el Mundial Júnior, en la que Mir remontó desde la posición 33 de la parrilla hasta el liderato con una exhibición increíble, pero se quedó sin premio porque se fue al suelo nada más ponerse primero. Ahora la historia es diferente, ahora va para campeón del mundo ya le saca después de cinco carreras 34 puntos a Fenati y 36 a Canet.

Volviendo al valenciano, bonita fue su pelea por la segunda plaza, en la que estuvo inmerso su amigo Binder hasta que se fue al suelo en la última vuelta. El del Estrella Galicia pudo con Di Giannantonio y con el valiente Ramírez, que por segunda carrera consecutiva se queda a las puertas del podio. Lo conseguirá antes o después, porque es muy bueno y muy peleón. También soñó con el cajón Guevara, pero se le vio con menos posibilidades que al gaditano o al valenciano en todo momento. El murciano no remató, como tantas otras veces. El resto de españoles, María Herrera fue vigésima y Arenas, como Martín, no acabó por caída.

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