Toni Bou quiere abrir el año con una victoria en Barcelona

El Palau Sant Jordi será escenario el próximo domingo, 7 de febrero, de una edición especial del Trial Indoor de Barcelona: la de su cuadragésimo aniversario en la que además de competir los mejores pilotos del mundo en la primera prueba del Mundial 2017, una serie de actos conmemorativos reunirá a las grandes leyendas de esta especialidad que vencieron en su día en Barcelona.

En cuanto a la competición, el gran favorito volverá a ser el diez veces campeón del mundo indoor Toni Bou (Montesa-HRC), que buscará su undécimo triunfo en el Sant Jordi, noveno consecutivo. Además, también diez veces campeón mundial de Trial al aire libre, puede lograr su victoria número noventa en el Mundial, quedando a solo nueve del mítico piloto británico Doug Lampkin, que se retiró con un total de 99.

Sus rivales en esta edición serán los tarraconenses Adam Raga (TRS), subcampeón del mundo 2016 y cinco veces ganador en Barcelona, y Albert Cabestany (Sherco), tercero en el Mundial 2016; Takahisa Fujinami (Montesa/JPN); el gerundense Jeroni Fajardo (Vértigo); el inglés James Dabill (Gas Gas); el joven piloto de 19 años Franzi Kadlek (Gas Gas/GER) y el barceonés Jaime Bustos (Montesa), piloto invitado (wild card) por tercer año, también de 19 años.

La competición se disputará en dos fases: la clasificación en la que participarán los ocho pilotos (por parejas) en cinco zonas más una prueba de velocidad y la final, en la que los cuatro mejores disputarán ocho zonas y tres pruebas de velocidad.

La prueba es realmente importante porque abrirá el Campeonato del Mundo Indoor (X.Trail) 2017, a la que seguirán Wiener Neustatd (Austria), el 11 de marzo; Marsella (Francias), 25 de marzo y Niza (Francia) (31 de marzo).

Con motivo del 40º aniversario del Trial Indoor de Barcelona se celebrarán una serie de actos conmemorativos y, por primera vez en el evento, que se celebra en el Sant Jordi desde 1991, los aficionados tendrá la oportunidad de ocupar localidades, llamadas 'Grada Pista' en las gradas retráctiles que se desplegarán y que estarán sobre la mismísima pista del Palau, que tendrá ocho zonas, y que ofrecerán un ángulo de visión inédito hasta la fecha.