El 'Alonsismo' vive en Japón
Conocemos a Mikiko y Takeshi dos de los mayores seguidores del asturiano y a Noriko, que sigue su estela con Carlos Sainz.
Hace ya unos minutos que ha amanecido, una fina neblina cubre el aire, denso en esta zona de la isla de Japón. Hay quien tiene frío y en la puerta del circuito de Suzuka, la que da entrada al paddock, decenas de personas esperan a sus ídolos. Son las cinco y diez de la mañana y Mikiko Goto coloca junto a Takeshi Goto una de las pancartas de fondo azul que han fabricado estos días para apoyar a Fernando Alonso, para recordar al asturiano que están aquí, que están con él, que siguen confiando en “el mejor”. Unos metros más allá hay otra inmensa tela de letras rojas y números negros sobre amarillo. Noriko sujeta el homenaje que ha hecho a su piloto favorito: Carlos Sainz.
La pareja de japoneses que sigue a Alonso allá donde va, llegan cada día desde Nagoya, cogen el tren y en 50 minutos llegan a la estación de Siroko en Suzuka, ya tienen los asientos de preferencia frente a la recta de meta y junto a otros amigos japoneses pretenden demostrar al asturiano que nunca estará solo. Ambos han ido a Mónaco, incluso han dormido al raso junto a sus amigos vascos y asturianos, a Montmeló, Malaisia… a muchos circuitos desde aquella primera vez que vieron a Fernando Alonso en el año 2001. ¿Por qué? Y aquí se sinceran. “Es el mejor, solo eso, no hay ninguna razón más y en Japón no hay nada más fuerte que o tener ninguna razón, esa es la clave”, responde Mikiko.
“Es muy grande, el más rápido, nos gusta como corre y todo lo que ha hecho en su carrera”, responde intentando encontrar puntos a los que apoyarse más allá de su propia filosofía de vida. No tienen edad, o lo la quieren decir, pero se gastan mucho dinero para apoyar al asturiano y sobre todo mucho tiempo, ellos que trabajan en una fábrica de cartulinas y tablones de madera.
Como Noriko es la mayor seguidora del 55 en el país del sol naciente. Ella viaja a todos los test y volverá a estar en Barcelona el próximo invierno para ver a Carlos Sainz. Le sigue desde que estuvo en Macao en el año 2010 ganando la cita de la Fórmula BMW y le animó cuando ganó las World Series. Hace unos días estaba en el hospitality de Toro Rosso y siempre intenta hacerse con algún pase de verdad o mentira para estar cerca de su adorado Carlos.
Es de Tokio, una chica joven que se siente feliz cada vez que piensa en el ‘Chili’. Y que este fin de semana gritará por el piloto madrileño hasta quedarse sin voz. Si Alonso es el gran ídolo en los pilotos de F1 en Japón, Sainz empieza a tener admiradores y hasta club de fan que, claro está, preside Noriko. Japón adora a España y los pilotos españoles, sobre todo Alonso, pero Sainz sigue su estela, son los más queridos en este increíble país donde la razón más fuerte para hacer algo es no tener ninguna razón.