Jorge Prado debuta el domingo en el Mundial con 15 años
Red Bull-KTM ha decidido que el piloto gallego se estrene en el GP de Bélgica de MX2. "Acabar en el Top 10 sería la leche", dice el lucense.
Jorge Prado va más rápido que su moto. El piloto gallego, la gran apuesta de futuro de KTM en el mundo del motocross, da una nueva pirueta en su carrera al debutar el próximo fin de semana en el Mundial con sólo 15 años. Su equipo ha decidido que el lucense cambie por unos días el Europeo de 250cc y se estrene en la máxima categoría. Lo hará en MX2, un sueño. "Toda mi carrera ha estado enfocada a correr el Mundial y el AMA y el próximo fin de semana voy a cumplir una primera parte del objetivo. Supone una motivación extra correr contra los mejores y poder medirme a ellos. Me apetece mucho porque creo que puedo hacer un papel digno y además me hace ilusión empezar en Lommel", afirma Jorge.
Correrá en casa, por así decirlo, pues allí, en esa localidad belga Prado vive desde hace cuatro años. Allí se trasladó junto a su familia, el mejor respaldo posible para él. Y probablemente hablamos de uno de los circuitos más complicados de todo el calendario del Mundial. Su terreno blando y arenoso no es apto para todos los paladares. "Me encanta correr en arena y se me da bien, por eso me gusta empezar en Lommel, pero en un Mundial será difícil aguantar dos mangas largas al ritmo de los mejores pilotos. Mi ventaja es que suelo salir muy bien y que voy bien en arena porque llevo cuatro años entrenando aquí. El secreto de la arena es solo entrenar mucho en ella para coger experiencia y fuerza", declara a lastlap.com.
Pero el reto no asusta a Prado, campeón del Mundo de 65cc, el año pasado de Europa de 125cc y actualmente cuarto en el Europeo de 250cc. "El Europeo ha sido una buena experiencia, con carreras muy duras, pilotos mucho mayores y horarios muy incómodos, pero estoy contento con el rendimiento que ha servido como un paso más hacia el Mundial", declara Jorge.
Un talento que ató bien atado KTM, un chaval con los pies en el suelo y todo el sostén de su familia, que nunca falla, un piloto que pese a sus sólo 15 años echa la vista atrás: "Hace dos años estaba subido en una 85cc y no podía ni soñar que ahora estaría con una dos y medio y debutando en el Mundial, pero aquí estamos y voy a darlo todo para no defraudar”.
Jorge, recuperado de la fuerte caída sufrida la semana pasada en un entrenamiento, confía en ganar en físico para poder pelearse con los mejores: "Ya tengo la misma estatura que Cairoli y solo me falta tener algo más de cuerpo y resistencia, pero eso se hace entrenando y entrenando". El domingo, en Lommel, llega el momento que tanto ha esperado. "He estado rodando muy deprisa últimamente y creo que estoy preparado para hacer una buena carrera. Mi objetivo es salir bien y aguantar todo lo que pueda; hacer un Top 10 en el debut sería la leche". Leche gallega en este caso. Con eso está todo dicho.