Max Verstappen: “Todavía no me lo puedo creer”
El joven holandés de Red Bull dio las gracias a su equipo por el coche y la estrategia que le permitió lograr su primer triunfo en el Mundial.
Lloraba dentro del casco. Ese fue el momento de debilidad que se permitió Max Verstappen en la carrera de España de Fórmula 1. Y ya. Porque después en el podio estaba emocionado, feliz, sonriendo como si se le fuera a desencajar la mandíbula. Pero ya. El adolescente holandés había cumplido su sueño, convertirse en ganador en Fórmula 1, un piloto que hace apenas tres años estaba subido a un kart.
“Es increíble, todavía no me lo puedo creer. Ha sido una carrera genial. Tengo que dar las gracias al equipo por darme un coche tan bueno. He conseguido algo así en mi primera carrera y es brillante. Es una gran sorpresa, por supuesto que no me esperaba algo así. El primer stint con el neumático blando fue bastante bueno después de que los Mercedes se estrellaran”, declaraba con dos campeones del mundo a su lado, Kimi Raikkonen con gesto tranquilo como suele, Sebastian Vettel enfadado por no haber ganado echando mano de la tradicional diplomacia de la F-1.
Pero Verstappen les miraba y no se lo creía. Así explicaba su gestión de la carrera, su estrategia, su forma de ganar en Barcelona: “Hay un momento en el que si ruedas muy cerca del de delante, destrozas tus neumáticos, así que decidimos entrar a boxes, entramos con los medios y las sensaciones con el coche eran fantásticas. Desde entonces he tenido que gestionar mi velocidad, mis neumáticos, y simplemente gestionar todo. Creo que hemos hecho la mejor estrategia posible y, sobre todo, en el último stint con Kimi detrás poniéndonos bajo presión, y más aún en un circuito como este, donde adelantar es tan difícil”.
Lo mejor de Verstappen es que logró la victoria sin tener el mejor coche de forma clara, el Red Bull ha mejorado mucho desde el coche que tenían en Rusia, pero como mínimo era alguna décima peor que el Ferrari. Max cuenta la clave: “Para mí ha sido cuestión de no cometer ningún error, lo hemos intentado y ha funcionado. Me siento muy bien, no solo por estar encima del podio, es una sensación fantástica”.
Al holandés, como niño que es, solo le quedaba mirar a su padre, un piloto que no pudo hacer lo que ha hecho su hijo, Jos Verstappen. “Mi padre me ha ayudado mucho y gracias a él he conseguido algo así, es muy impresionante, creo que está muy orgulloso y feliz”. Lógico.