Ecclestone tilda de "charlatanes" a algunos pilotos por sus quejas
Bernie no tiene reparos en decir que los pilotos "pueden decir lo que quieran, pero no tienen fuerza alguna" a raíz de la carta que emitió la GPDA sobre la situación de la F-1.
“Los pilotos han llegado a la conclusión de que el proceso de toma de decisiones en el deporte es obsoleto y mal estructurado y evita que se estén haciendo progresos. Por tanto, nos gustaría solicitar que se considere la reestructuración de su gobierno". Esto, y más cosas, es lo que pidieron los pilotos a través del escrito que la GPDA emitió la semana pasada, una carta en la que mostraron su descontento con la situación actual de la Fórmula 1 y que ha recibido réplica de Ecclestone desde Bahrain.
"Pueden decir lo que quieran, ellos no pueden hacer nada. No tienen fuerza alguna. Tienen una opinión y todo el mundo tiene una. Realmente es su discusión con su equipo, y el equipo tiene una voz. Sólo están diciendo lo que los equipos les han dicho que digan", opinaba el británico antes los medios desplazados a Shakir, donde dijo que cree que los equipos utilizan a sus pilotos como portavoces porque "piensan que es mejor": "Creen que la gente escucha a los pilotos, los medios les escucháis".
Bernie no se quedó ahí, también aseguró que "algunos pilotos son unos charlatanes", aunque no quiso dar nombres: "Son los que lo son". Sobre quién si habló de forma concreta fue de Vettel y su teoría de la heladería con la que ilustró sus críticas al Mundial: "Es probable que tenga razón, pero ¿creen que va a ganar esta carrera? Debe hablar con su jefe y decirle lo mismo. Ellos han estado funcionando como una heladería durante años".
Niki Lauda, presente en la conversación de Ecclestone con los periodistas, también quiso opinar de la carta de la GPDA y señaló con el dedo a un único responsable, su presidente Alex Wurz. "Wurz habló en nombre de todos los pilotos. Es todo mentira, él está solo, puedo garantizarlo. Es un maestro de esto. No tenemos nada que ver con ello", declaró el austriaco de Mercedes. De momento, las quejas de los pilotos sólo han servido como objeto para crear un cruce de críticas.