Los ocho mejores-peores momentos de Alonso en F1

Australia 2001

Debut. Dejó claro su potencia y terminó la carrera con un coche que apenas podía sostenerse, aquel European Minardi que terminaron de hacer en el mismo circuito, pero fue penúltimo y con vuelta perdida.

Hungría 2006

Las mejores primeras vueltas de un piloto, probablemente, en la historia de la F-1, en lluvia, se puso líder en poco tiempo, dobló a Schumacher, pero… una tuerca mal apretada le dejó sin una victoria merecida.

Mónaco 2007

Una carrera perfecta con McLaren Mercedes, logró la pole, vuelta rápida y victoria, pero ese día comenzó la guerra con Hamilton porque el inglés y su padre dijeron que el equipo había actuado a favor del campeón español. Ese día cambió su historia.

Singapur 2008

Alonso consiguió la victoria en la temporada de su regreso a Renault con un coche que no era competitivo, pero todo quedó empañado después de que se supiera que su equipo había pedido a Piquet, su compañero entonces, que se estrellara a propósito para provocar la salida del coche de seguridad.

Alemania 2010

Fernando consiguió la victoria con su Ferrari y lo hubiera logrado, posiblemente, aunque su equipo no hubiera pedido a Felipe Massa que se dejara adelantar con aquel famoso Fernando is faster tan you que casi deletreó Smedley, el ingeniero del brasileño.

Bélgica 2012

Ese abandono finalmente le costaría un título del que se quedó muy cerca, pero aquel día Fernando volvió a tener una suerte increíble porque el coche de Romain Grosjean le pasó a centímetros de la cabeza.

Brasil 2012

Esa cara, esos ojos con el casco puesto mirando al infinito… así terminó en Interlagos la mejor temporada que se recuerda de un piloto. Fue segundo, en la carrera y en el campeonato y se quedó sin título, pero ese año dejó claro para algunos años más quien es el mejor de la parrilla.

Australia 2016

De nuevo en Australia tras perderse el inicio de la temporada del año anterior, con muchas esperanzas puestas en este nuevo McLaren Honda y cierta sorpresa viernes y sábado con la competitividad del coche. En carrera sufrió su accidente más espectacular, abandonó evidentemente, pero salvó la vida.