Sebastian Vettel, un kartista más entrenando en Lonato
El piloto de Ferrari, tetracampeón de F-1, pasó una mañana rodando y dio 100 vueltas a una pista compartida con el resto de pilotos de Tony Kart.
El kárting es la mejor preparación para la F-1. Frase repetida hasta la saciedad por los que saben de verdad de esto, los pilotos. Sensaciones similares simuladas a pequeña escala. Y Sebastian Vettel, que fue campeón de Alemania y de Europa en sus inicios, lo sigue al pie de la letra. Tanto que el pasado miércoles apareció en la pista italiana de Lonato junto a su hermano pequeño Fabian, su padre Norbert y al expiloto Jarno Trulli para rodar y rodar al volante de un kart.
Obviamente, el tetracampeón de Heppenheim tenía prevista la visita y el equipo Tony Kart-Vortex, con el que Vettel mantiene una gran relación desde sus inicios (en especial con su jefe Roberto Robazzi), le tenía todo preparado para que probara el DDS con especificaciones del nuevo OK. Un kart de 125cc sin marchas que debutó en competición la semana pasada en la WSK Cup sustituyendo al KF y que son propulsados por motores de tiro directo desapareciendo el arranque eléctrico y el embrague centrífugo. Más simples y baratos, menos seguros en caso de pararse.
Vettel dio cien vueltas ante la presencia y fija de varios jóvenes kartistas, todos bajo el paraguas de Tony Kart, que también entrenaban en la pista del South Garda Karting. Todos ellos, chavales que sueñan con dedicar su vida a la competición y que ya compiten en diferentes categorías por lo que conocen las normas básicas y no suponían ningún peligro para el piloto de Ferrari.
Un referente al que imitar que al terminar su entrenamiento posó con todos los niños que se le acercaron y que le idolatran, y se hartó de firmar autógrafos. En el horizonte, los test de pretemporada de F-1 que comienzan el lunes 22 de febrero en Montmeló. El piloto de 28 años se subirá al nuevo 667 con el objetivo de poner los mimbres para aspirar a su quinto título, el primero en Maranello, el primero fuera de Red Bull.