El Ferrari 335 S bate el récord al venderse en 32 millones
La subasta de París no defraudó y el coche superó los 28,5 millones de euros firmados por otro cavallino rampante. Con ese modelo falleció el marqués de Portago.
Y el Ferrari 335 S Spider Scaglietti hizo historia. Era la gran atracción en la subasta de Artcurial Retromobile celebrada en París y no defraudó a nadie: 32.075.200 euros, esa fue la cantidad a la que llegó la puja, que hace que esa joya de 1957 firme el récord de un coche clásico en subasta. Ese cavallino rampante, hasta ahora propiedad de Pierre Bardinon, queda ahora en manos de "un coleccionista internacional" del que no ha trascendido el nombre.
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Con esa cifra, astronómica por más que incluyamos las palabras París o subasta en la frase, el 335 S supera al Ferrari 250 GTO Berlinetta de 1962 que alcanzó los 28,5 millones de euros en agosto de 2014 en la subasta llevada a cabo por Bonhams Quail Lodge. El gran triunfador del viernes parisino es un V12 y 3.8 litros (alrededor de 360 caballos), del que sólo se fabricaron cuatro unidades. Pilotos de leyenda como Stirling Moss o Mike Hawthorn tuvieron la suerte de ponerse al volante.
A modo de introducción a la subasta, ese Ferrari fue descrito como "una estrella fabulosa". Y no puede ser menos, pues el suyo es sabor a historia del automovilismo. Incluso es protagonista de algunos pasajes terribles, como el protagonizado en la Mille Miglia de 1957, en la que perdió la vida Alfonso de Portago. Pilotaba un 335 S, al igual que quien se impuso aquel año (el último en el que se disputó la mítica prueba italiana), Wolfgang von Trips.