Álvaro Bautista: “No me quitaré para que pase Valentino Rossi”

—Su mejor posición en la parrilla de MotoGP de este año es el decimoquinto de Jerez, pero promedia la decimonovena plaza en las diecisiete carreras del año. Dicho de otro modo, Rossi, que saldrá el último en Valencia, el vigesimoquinto, le tendrá a tiro de piedra en los primeros compases de la prueba que decide el título. ¿Genera eso tensión, curiosidad o incertidumbre?

—Lo que genera es que me están abrasando en las redes sociales para que deje pasar a Valentino y que se pueda enfrentar lo antes posible con Lorenzo en esa carrera que decide el campeonato.

—¿Y qué les dice a esos aficionados que le piden tal cosa?

—Nada. Sólo leo lo que me dicen y ya está, sin responderles, porque para mí es una carrera más en la que lo intentaré hacer lo mejor posible. Sería bonito ver pelear a Rossi y Lorenzo de tú a tú en Valencia, pero yo no me voy a quitar para dejar pasar a Rossi. Quiero hacer mi carrera y alcanzar mi mejor posición posible, y eso pasa por salir lo más rápido que pueda en cuanto se apague el semáforo. En cualquier caso, no creo que yo sea un problema para Rossi y a la calderilla se la quitará rápido de delante. (Risas).

—En todo caso, ¿cómo se sentirá si llega a ser consciente de que le tiene a su espalda?

—Algo de presión extra sí que habrá si le veo. Eso significará que me está adelantando, pero ya digo que no creo que pueda devolverle el adelantamiento porque, según me pase, lo normal es que se me escape enseguida. No estoy en condiciones este año de pelear con él. Me pasará bien.

—¿Le ve llegando al grupo de cabeza y, en tal caso, cuánto tiempo cree que necesitará para hacerlo?

—En condiciones normales, Valentino como mucho podría ser cuarto en la carrera de Valencia. Si saliendo con ellos, con Lorenzo, Márquez y Pedrosa ya es difícil seguirlos, imagine saliendo el último. Eso sí, Valentino es Valentino y en Valencia ya se han visto en el pasado carreras muy especiales. Hace tres años hubo varios pilotos que salimos desde el pit lane, con la pista entre seca y mojada, y ganó Pedrosa saliendo desde ahí. En caso de lluvia o circunstancias raras, si Valentino se la juega mucho puede llegar más arriba de ese cuarto puesto que para mí, en una situación normal, es su posición natural en esa carrera.

—Si Rossi acabase cuarto, como intuye, necesitaría que Lorenzo fuese tercero para ser campeón, porque con un segundo o un primero del mallorquín lo sería él. ¿Se imagina que con todo el lío que ha tenido con Márquez fuera éste, batiendo a Lorenzo, el que al final le diera el título a Rossi en el último momento?

—(Risas). ¡Eso sería la bomba! Lorenzo tiene que hacer lo que sea por ganar la carrera, lo que en circunstancias normales debería garantizarle el título, porque así sólo se lo quitaría un segundo de Rossi. Pero se puede dar el caso de que no gane la carrera y que dependa todo de si acaba segundo o tercero… Sería tremendo que le acabara dando el título a Rossi la posición final de Márquez.

—¿Cree que Márquez quiere ayudar a Lorenzo como dijo Rossi al llegar a la rueda de prensa del jueves en Sepang?

—A ver… Marc no ayudó a Lorenzo en Australia. ¿Que jugó con ellos? Se podría haber ido solo a lo mejor, pero no quiso ayudar a Lorenzo porque le ganó en la última vuelta. Luego, al oír las declaraciones que Rossi hacía contra él, Márquez dijo: “Ahora le voy a ayudar para que lo vea”. Y se pasaron muchas veces cortándole el ritmo. Jugándose Valentino el Mundial como estaba haciendo… No se puede jugar así con un tío que se está jugando el Mundial.

—Pero Márquez no hace nada fuera de la legalidad…

—Marc tenía mejor ritmo y se podía haber ido, pero no hace nada antideportivo quedándose con Valentino. Cada uno puede hacer su estrategia de carrera, aunque es cierto que era peligroso para Valentino, porque él se estaba jugando un Mundial mientras que su rival no lo hacía. Con esto no quiero decir que esté a favor ni de uno ni de otro, porque ninguno de los dos es un santo. Lo que intento es verlo de la manera más objetiva posible y esto es lo que veo.

—¿Y qué opina sobre la maniobra de Sepang en cuestión?

—Es una acción complicada, porque es muy rápida. No hay patada de Valentino como tal. Marc quería entrar y se encuentra a Valentino parado. Patada para tirarle creo que no hay. O bien Márquez le mueve la pierna del impacto o es un acto reflejo de Valentino al sentirle. En todo caso, es una acción sancionable, porque va a sacarle.

—¿Ve justa la sanción de tres puntos que obliga a Rossi a salir último en Valencia?

—No lo sé… Otro piloto con otras circunstancias hubiera recibido una sanción más dura. Se ha levantado un poco la mano con Rossi por el bien del espectáculo del campeonato. Han entendido las circunstancias que rodeaban la acción, y eso es algo que me parece bien.

—¿Qué circunstancias?

—Que Rossi estaba hasta las narices de Márquez por tantas pasadas como habían tenido en tan poco tiempo y a principio de carrera.

—¿Quiere decir con eso que los dos se equivocaron?

—Es difícil decir eso. Habría que ver si Marc se podía ir y, vistos los entrenamientos, sí que creo que podría haberlo hecho. El que no podía irse era Rossi, y menos con las pasadas que le estaba metiendo Márquez.

—¿Qué ambiente espera en Valencia?

—Caliente, sin duda, y lo que menos me gusta es que por ser seguidor de Rossi o de Márquez haya que odiar al otro o a los demás. Esto se está pareciendo al fútbol y eso no me gusta. Nos tienen que gustar las motos, como siempre, y si luego gana el tuyo, mejor que mejor, pero fuera odios.

—Pues muchas gracias. Esto convalida por una de las columnas en el AS que venía haciendo hasta el año pasado.

—¡O por dos! Es un placer.