La contaminación amenaza los planes del GP de Singapur
Una gran nube de niebla cubre el cielo debido a la quema de bosques por los granjeros en la zona de Sumatra. El GP mantiene por ahora su programa.
Y el cielo no abre. En Singapur aumentan las dudas respecto a que el gran premio de Fórmula 1 previsto para este fin de semana pueda disputarse con normalidad. O incluso disputarse, a secas. Todo se debe a la gran nube de niebla que cubre el cielo como consecuencia de la quema de bosques por los granjeros en la zona de Sumatra.
El propio Bernie Ecclestone está al corriente de lo sucedido. Y ha pedido a las autoridades de Singapur que le informen al minuto sobre las condiciones climáticas y de contaminación en torno al circuito de Marina Bay. “La posibilidad de niebla es sólo uno de los problemas que se plantean en el plan de contingencia del GP. El plan fue formulado y perfeccionado con los accionistas, el aparato de gobierno y la comunidad de la F1. En el caso de que la niebla afecte a la visibilidad y a la salud pública, el GP de Singapur trabajará de cerca antes de tomar una decisión colectiva en torno al evento“, afirma un representante del GP, al que Lewis Hamilton llega con 53 puntos de ventaja sobre Nico Rosberg en la clasificación de pilotos.
Esa nube de contaminación podría afectar seriamente a la visibilidad de los pilotos, más aún en un GP cuya carrera se disputa de noche. También, obviamente, a la respiración de todos los que acudan al Circuito de Marina Bay. La quema de bosques se ha descontrolado y los PSI (Pollutants Standard Index, o Índice Estándar de Contaminantes) se han disparado y rozan ya la barrera de lo “no saludable”.