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LA INTRAHISTORIA

Rivas y Martínez tenían que correr en Indianápolis

Habrá un minuto de silencio en su honor el domingo y Sardá está recogiendo firmas en dos gorras de Dunlop de recuerdo para las familias.

Indianapolis
Josep Sardá con la gorras en Indianápolis.

Así de cruel resulta a veces el destino. Dani Rivas y Bernat Martínez tenían previsto correr este fin de semana en Indianápolis una nueva prueba del campeonato MotoAmérica, ese certamen AMA estadounidense en el que perdieron la vida hace unos días fruto de una colisión múltiple tras darse la salida en su prueba, la de SBK. Su recuerdo sí que está presente, muy presente. Además de aparecer sus nombres en los cascos de varios pilotos como Márquez, Simón o Aleix, Josep Sardá, perito de Dunlop, el proveedor único de neumáticos en Moto2 y Moto3, se está encargando de que se hable de ellos en el paddock y de que desde el Mundial se tenga un detalle con las familias de ambos.

El catalán andaba ayer por el paddock recogiendo firmas en sendas gorras amarillas de su marca para entregárselas a Willy, el padre de Dani, y María, la novia de Bernat. “BM #76 Siempre contigo”, había escrito Sardá en la del valenciano y “DR #7 Siempre contigo” en la del gallego. En ellas ya habían estampado sus firmas Marc, Aleix, Rabat o Lorenzo cuando Sardá le contó a AS su iniciativa y, al final del día, ya habían firmado la mayoría de los mundialistas españoles.

“Estamos fastidiados”, contaba Sardá apesadumbrado, buen conocedor de ambos y muy próximo sobre todo a Rivas. “Había corrido conmigo siendo niño y los últimos mensajes que tengo en el móvil con él es que venía a correr aquí. Le dije que no se preocupara por los neumáticos, que yo hacía para él lo que hiciera falta y que ya tenía técnico”, cuenta Josep con esas gorras amarillas en la mano que recibirán pronto los familiares de los dos pilotos caídos, una especie de abrazo colectivo con el que acompañarles en el sentimiento. Y el domingo, a las 16:10 en hora española, se llevará a cabo un sentido minuto de silencio en memoria de Rivas y Martínez en plena brickyard, esa yarda de ladrillo en plena recta de meta que sólo existe en el Indianapolis Motor Speedway.