Pol y Aleix, operados del antebrazo y la mano derecha

Los hermanos Espargaró han pasado por el quirófano prácticamente al mismo tiempo. El pequeño, Pol, lo hizo el lunes por la noche, en Madrid, para ser intervenido por el doctor Villamor del síndrome compartimental que le agarrotaba el antebrazo derecho. Y el mayor, Aleix, lo hizo el martes por la mañana, en Barcelona, donde el doctor Mir le operó del ligamento de la mano derecha que se rompió el sábado en Le Mans, tras salir volando de su Suzuki a 200 por hora.

El campeón de Moto2 se puso en manos del mismo médico que el pasado 3 de abril ya operó a Pedrosa de la misma lesión, aunque en este caso la intervención fue más agresiva y requirió la retirada de la fascia, lo que de momento no ha sido necesario en el caso del piloto del equipo Yamaha Tech 3. Todo fue bien y el de Granollers volvió a casa con tiempo para pasarse a ver a su hermano.

“Ya había notado algunas veces molestias y pensé que poco después de la carrera se me pasarían, pero no fue así y por eso rápidamente vimos que necesitaba que me viese un especialista y hemos decidido acelerar al máximo el proceso y consultar a Ángel Villamor. La verdad es que había notado algunas otras veces esa sensación de pérdida de fuerza en el antebrazo, pero no le quise dar mayor importancia. En estas dos últimas carreras ha sido más grave y, si bien en Jerez lo achaqué al tipo de circuito y al esfuerzo que hice en las primeras vueltas, en Le Mans ha sido peor porque me empezó a costar pilotar desde muy pronto”, asegura un Pol que deja para el final lo más importante de todo: “La operación ha ido bien y puedo empezar a trabajar en breve para intentar llegar en las mejores condiciones posibles a las siguientes carreras”. La más inminente es Mugello, la del GP de Italia en el fin de semana del 29 al 31 de mayo.

En cuanto al de Suzuki, Mir explicó que “Aleix ha sido intervenido del pulgar derecho por presentar una desinserción completa del ligamento colateral cubital, procediéndose a la reinserción de dicho ligamento con un anchor de dos milímetros y sutura intraligamentaria”. Su objetivo también es estar para Italia, aunque es mucho más duda que su hermano Pol, que estará casi con total seguridad. El propio Aleix lo deja en el aire: "Estoy muy contento con la operación. El ligamento colateral de la mano estaba destrozado, así que ¡gran trabajo, como siempre, del doctor Xavier Mir! Esperamos llegar a Mugello, será difícil pero sin duda ¡lo intentaré!