RALLY DE ARGENTINA
Primera victoria de Meeke y quinto puesto para Sordo
Ostberg completó el doblete de Citroën en una prueba del Mundial presidida por los incidentes. El español salvó los muebles tras sus problemas.
![Kris Meeke, vencedor en Argentina.](https://img.asmedia.epimg.net/resizer/v2/SMNGCZJWKJMQPA4XKQDO4HIY3M.jpg?auth=7b05eeb1e555058ef0aeb7dbbbb538dd6840715300139563c74ad03644cb0d1e&width=360&height=203&smart=true)
Kris Meeke se ha llevado su primer triunfo en el Mundial en el rally del caos. Argentina ha sido una de las pruebas con más incidentes que se recuerdan, y en ella han emergido los Citroën DS3, que se han llevado el doblete con el británico y Mads Ostberg. Elfyn Evans completaba el podio para Ford y Dani Sordo salvaba los muebles de Hyundai con su quinto puesto.
Ni en la última jornada ha habido paz en el Rally de Argentina, a pesar de que sólo constaba de dos pasadas por el mítico tramo de El Cóndor. El primer sobresalto lo daba Jari-Matti Latvala, que se retiraba en la primera con su motor roto, y después seguían su camino Andreas Mikkelsen y Thierry Neuville, que chocaban contra la misma piedra y se retiraban en el Power Stage, en el que Sebastien Ogier sumaba los tres puntos del vencedor como consuelo a su desafortunado fin de semana.
Meeke, protegido del anhelado Colin McRae, ha mostrado gran velocidad a lo largo de su carrera deportiva, pero también poca fiabilidad y muchos accidentes, como el que le privó de un triunfo asegurado en el Rally de Alemania del pasado año, que propició el primer triunfo y doblete de Hyundai. Precisamente desde la cita germana en 2013, Citroën llevaba sin sumar un triunfo. En esa ocasión fue Sordo el que lo consiguió.
A pesar de sus problemas de dirección en la primera etapa, y el abandono en la segunda por un fallo eléctrico, Dani llega a Portugal con la moral a tope. En Argentina ha mostrado potencial cuando le han respetado los problemas y la cita lusa, que este año pasa al norte, a los alrededores de Oporto, siempre se le ha dado muy bien. Y se espera una avalancha de españoles, sobre todo gallegos, que tradicionalmente abarrotaban las cunetas en los tramos cercanos a la frontera.