-Ha sacado petróleo de la pelea a 13. ¿Tenía claro lo que tenía que hacer?
-Tenía claro que tenía que llevar la moto entera de vuelta al box y coger los máximos puntos posibles. Nunca es fácil una carrera en grupo en Moto3. Y menos cuando no estás al cien por cien físicamente. Hemos tomado encima una elección de neumáticos totalmente opuesta: hemos corrido con el H y Danny con el M. Creo que de los 15 primeros he sido el único que ha llevado el H. Al principio iba un poco colgado, a mitad de carrera un poco menos colgado, y al final de carrera un poco mejor. Veinte puntos, segundos en el campeonato, algo impensable después del invierno que he pasado. -Me ha dicho en la tele que ha corrido con fiebre.
-Antonio, la persona que ha viajado conmigo, está medio con gripe, se ha puesto malo. Le he hecho dormir en el váter aunque, total, para nada: entre la música de la calle y lo mal que estaba yo no llegan a tres las horas que he dormido. Esta mañana me he levantado con una sudada de impresión, con fiebre, malo que ni veía. -Kent está un paso por delante. En Austin se vio en los entrenamientos pero aquí ha sido más en carrera.
-Yo creo que está sufriendo el efecto Márquez, le sale todo: puede poner la rueda de detrás delante, o la de delante detrás, y le sale igual. Esta mañana con el H ha hecho 9.0, 9.1 tirando a por mí. Ya habéis visto el ritmo de carrera… Le sale todo, aunque le quites el freno de delante le sale el tiempo. Vamos a ver si vamos encontrando el ritmo que nos falta y a ver qué pasa. Egoístamente creo que me puede hacer crecer como piloto. El campeonato es muy largo y tal y como se presenta el Moto3 esto va a ser una lucha por un punto en cada carrera. -¿El objetivo es luchar por el título?
-Hombre, es mi último año. Si la intención no es esa después de ser tu último año viniendo del mejor año de tu carrera deportiva y estando en uno de los equipos más solventes económicamente de la categoría, con uno de los equipos con más apoyo de Honda… Creo que es el momento de hacerlo. Voy a pensar solo en este año y el siguiente, si estoy en casa, dios dirá.