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LAS EXPECTATIVAS DEL EQUIPO DE ALONSO

"Habrá que tener paciencia hasta la segunda o tercera carrera"

Ron Dennis, el gran jefe de McLaren cree que están "tomando riesgos técnicos calculados" para desarrollar mejor y más deprisa el coche que sus rivales.

Madrid
Ron Dennis, jefe máximo de McLaren.
KAZUHIRO NOGIAFP

Tranquilidad. Calma. Paciencia. Flema inglesa. Ron Dennis analizando este comienzo de pretemporada. Test de Jerez y su equipo rodó 79 vueltas por las más de 514 que completó la auténtica referencia en la F-1 actual, el equipo Mercedes.

“¿Estamos sorprendidos de que un Mercedes pueda hacer más de cien vueltas? En absoluto, porque ahí es donde uno podría esperar que estuvieran después de una temporada en la que dominaron y después de haber desarrollado un paquete muy completo y eficaz. Ahora es evidente que si estás atrasado en tu desarrollo, en cualquier deporte, eso te obliga a ir más deprisa de lo que hace el resto, si no no va a ser posible coger a los que están arriba”, declara Dennis.

En cualquier caso, todo esto estaba ya analizado por McLaren y su presidente sabe qué estrategia deben seguir a partir de ahora: “Hemos tomado algunos riesgos técnicos calculados. Sobre todo en lo que se refiere a las tecnologías que estamos utilizando por primera vez y en las que tenemos que trabajar muy duro para conseguir ventajas en el rendimiento”.

Así las cosas, la intención del equipo en el que militan Alonso y Button, es llegar a Melbourne con un coche decente para terminar la carrera y a partir de ahí ir creciendo para en la tercera carrera, la de China, mostrar una parte del verdadero potencial que pueden conseguir. Así lo dice Dennis: “Probablemente ni siquiera será en Australia cuando sepamos lo competitivos que podemos ser, espero que después de dos o tres grandes premios realmente consigamos la configuración del coche que queremos. La palabra clave en el equipo es paciencia. Tenemos que vivir con algunas frustraciones como es normal por el momento, porque algunos de esos sistemas novedosos aún no están optimizados”.

Y en cuanto al desarrollo, en el equipo McLaren Honda se encuentran con un problema que puede ser relativamente grave: la diferencia cultural entre las dos vertientes de la escudería, la inglesa y la japonesa. Incluso el idioma es un impedimento para que el trabajo sea rápido y ágil: “El equipo de Honda es muy nuevo y su inglés es mejor que nuestro japonés, así que no podemos ser críticos porque no se comuniquen a la perfección con nosotros porque están hablando en nuestro idioma, así que solo necesitamos un poco de paciencia antes de que todo funcione correctamente”.