Quandt: “Lo importante es que un Mini gane, no qué piloto”
Sven Quandt, jefe del X-Raid, persigue el cuarto título seguido en un raid en el que también alinean un buggy: “Estaremos contentos si llegamos tan lejos como Peugeot”
Hablar de los Quandt es hablar de la familia más rica de Alemania, accionistas mayoritarios de BMW. Hablar de Sven Quandt es hacerlo del jefe del X-Raid, equipo que con el Mini All4 Racing ha ganado los tres últimos títulos en coches. El de 2014 con el sello de Nani Roma.
—El X-Raid y el Mini ALL4 Racing vuelven a ser el equipo y el vehículo a batir. ¿Qué cambia en el coche respecto al vencedor de 2014?
—La verdad es que en el desarrollo del coche es complicado hacer algo mejor. Ha habido pequeños retoques, pero sobre todo no queremos perder en fiabilidad, nuestro punto fuerte y donde debemos ser muy cuidadosos. La presión es la misma que en años pasados, así que estamos preparados.
—El Dakar 2014 acabó con polémica por las órdenes de equipo. ¿Cómo lo recuerda?
—El año anterior habíamos vivido una situación diferente, cada año es distinto y cambia quién está delante y quién detrás. Stéphane (Peterhansel) y Nani (Roma) querían ganar y se resolvió de la mejor manera. Somos un equipo, pero es normal que a veces surjan discrepancias. Mi función es la de mantener a la gente unida, a todos los que trabajamos en el equipo volcados en un mismo objetivo.
—Tienen tres pilotos de Mini oficiales y siete privados. ¿El enemigo está en casa?
—Para mí lo importante es que un Mini gane, no qué piloto. No vamos a anticipar lo que puede deparar la carrera, estamos abiertos a todas las posibilidades, tenemos una buena alineación de pilotos para ganar el Dakar y eso es lo más importante. Con los Toyota y los Peugeot en el terreno de juego, el Dakar será de todo menos fácil, pero con nuestra experiencia tendremos grandes opciones.
—¿Cómo consigue la motivación un Dakar tras otro?
—Lograr la victoria en el Dakar es fácil motivación para uno, o al menos para mí. Siempre he tratado de no rendirme. Desde el primer Dakar fue la norma. No hay muchos equipos que hayan podido ganar tres seguidos, ahora buscamos el cuarto.
—Ya que el futuro es el buggy, han hecho ustedes uno...
—Para este año todavía es un experimento. Evidentemente hemos tenido problemas, pero es normal en un proyecto así. Cogimos el coche que había desarrollado Al-Attiyah y empezamos a reconstruirlo. Queremos ver hasta dónde se llega en dos ruedas motrices. Estaremos contentos si el coche acaba el rally, si logramos llegar tan lejos como Peugeot. Creo que podemos alcanzar la meta, aunque no estoy al cien por cien seguro. El reto de Chicherit es acabar el Dakar, no sumar victorias. El trabajo está enfocado al futuro, entonces sí querremos ganar. El objetivo que perseguimos es aprovechar al máximo el reglamento.