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Superbikes

David Salom: “El reto de la EVO ha merecido la pena este año”

El mallorquín, campeón de la categoría, espera que Kawasaki le aclare el futuro para la próxima campaña: “Lo más seguro es que compita con el equipo Pedercini”

David Salom
SBKDIARIO AS

—El título EVO, de motos privadas, es suyo. No sé si ya duele menos la mano.

Salom compara la EVO con la SBK

Motor. No sé qué caballaje puede sacar cada marca, pero nosotros entre la EVO y la SBK podemos estar hablando de unos 30 ó 35 caballos. Electrónica. Es la gran diferencia. Lo que te hace gestionar el resto de la moto, lo relativo al motor y a la entrega de potencia, y a las frenadas. Reducir con embrague en la EVO y hacerlo sin embrague en la SBK, eso te ayuda a tener mucho más controlada la moto en la frenada y rodar más rápido. Consumo. Suele ser el mismo, porque en la SBK está limitada la potencia, no pueden sacar esos doscientos y pico caballos de golpe. Neumáticos. Hay variación. Pirelli llevó unos neumáticos más blandos para la EVO, ya que a la hora de acelerar no consumimos tanta goma y no hacemos tanta presión en el neumático trasero. En la última cita utilizamos el mismo neumático que las SBK y fue en la que en entrenamientos estuvimos más cerca. Gestión de curva. En la EVO debes aprovechar el paso por curva, ya que la moto luego acelera menos. El paso por curva es algo más rápido en la EVO que en la SBK, debes beneficiarte para compensar la potencia que luego tiene la SBK.

—Sí, la verdad es que en las carreras ya dolía menos. He mejorado mucho tras la operación, aunque me molestaba al afrontar varias carreras seguidas. Pero he ganado la categoría y el reto ha merecido la pena.

—Se dijo que la supervivencia de Superbike pasaba por las EVO y la remodelación de Dorna. ¿En el camino correcto?

—Está claro que se ha mejorado, de hecho equipos no oficiales han tenido la oportunidad de estar arriba. Es bueno que no necesites unos presupuestos tan grandes para luchar.

—Su guerra ha sido con Niccolò Canepa, incluso ha podido parecer fácil al final. ¿Lo fue?

—Puede sonar sencillo, entre comillas, pero son 13 carreras de 24 en las que estuve delante y eso me permitió llegar al final con una ventaja importante.

—Tenemos a un campeón EVO, pero sin equipo. ¿Futuro?

—Es complicado, cada año tienes que estar luchando por una moto. Estoy hablando con Kawasaki, me quieren ayudar por el trabajo realizado y aún está por definir el sitio, pero lo más seguro es que sea el equipo Pedercini en el que Kawasaki, a quien corresponde la decisión, me quiera alinear.

—Un equipo satélite...

—Sí, pero con apoyo y ayuda oficial sólida. Yo, al ser expiloto oficial Kawasaki, correré en un equipo satélite pero con moto oficial. El objetivo era desarrollar la moto y eso se ha hecho.

—Aparca la moto y ya en Mallorca toca volcarse en su Escuela de Pilotos DS.

—La llevo junto con mi hermano. Tenemos 33 pilotos desde los dos años y medio hasta los dieciocho, supone mucho trabajo y dedicación, pero estamos contentos porque además tenemos una Copa en la que hay 16 chicos. Tenemos algunos que son muy rápidos y tratamos de ayudarles, aunque económicamente no es fácil. Hay cuatro o cinco niños que valen la pena.

—¿Cómo vio el desenlace del Mundial, el hecho de que Baz desobedeciera las órdenes de Kawasaki y no favoreciera a Sykes, con lo que el título fue para Guintoli?

—Puedes tratar de entender la situación de Loris, pero es complicado. Aquí cada uno tiene sus razones, pero yo, en mi caso, como piloto y más que nada como persona, hubiera cedido la posición a Tom. Vale que te vas a ir del equipo, pero en ese momento sigues trabajando para él y para una marca. Es quien realmente te paga. Loris lo ha llevado más a una cuestión personal que profesional y creo que en ese momento se equivocó.