En Red Bull ya sueñan con el título de Daniel Ricciardo

Sonrisa real, sonrisa de ensayo. Pidió ver la imagen un par de veces. En una no había salido bien, la sonrisa apenas estaba preparada y el fotógrafo se había adelantado. ‘Tranquilo, Daniel, va en pequeño, apenas se ve’, le dije, pero no se fio y tuvimos que repetir la foto de entrevistador y entrevistado. ¿Algo más? ¿Te preocupa algo de lo que has contado? Nada, todo bien. ¿Lo de ser campeón? Y ahí sí, una vez más, abrió la sonrisa como si fuera uno de esos que ya conoce su destino. Era Hungaroring, antes de que se disputase la carrera en la que Daniel Ricciardo logró su segunda victoria de la temporada y en ese momento estaba a 84 puntos de Nico Rosberg y a 70 de Lewis Hamilton. “Nada es imposible, mi objetivo es ser campeón del mundo”, dijo ante la pregunta del milagro. Una carrera después, y una nueva victoria, esta vez en Spa, el australiano de Red Bull está a 64 del alemán que sigue líder y a 35 del británico. Lejos aún, muy lejos. Pero…

Recordemos que Red Bull, el equipo que ha ganado los últimos cuatro títulos mundiales, el mismo que en los entrenamientos de pretemporada apenas podía rodar y que en estos momentos de la temporada lleva ya tres victorias con Ricciardo y seis podios, cuatro de la nueva joven estrella y dos de Sebastian Vettel. Es decir, que tienen capacidad de innovar, de sorprender, y de conseguir una evolución importante en su coche para plantar cara a los poderosos coches alemanes. Otra cosa es que lo consigan, pero ya sueñan con el título. A pesar de que la escudería de la bebida energética suele llevar pequeñas mejoras a cada carrera, también tienen prevista una gran evolución para Singapur. Y los sueños apuntan a un triunfo en el circuito urbano de noche y otro en Suzuka, trazado Red Bull. A partir de ahí, veríamos.

Pese a todo, en público, el jefe del equipo Red Bull, Christian Horner, no reconoce ese objetivo: “En Spa nos beneficiamos de lo que pasó entre los pilotos de Mercedes, pero es cierto que no contábamos con ser competitivos en esa pista, es increíble que hayamos ganado en Montreal y Spa, más aún después de lo que nos pasó durante la pretemporada”. Y después hace suyo un lema que muchos deportistas han utilizado: “Debemos ir carrera a carrera, preocuparnos de nosotros mismos, intentar mejorar”. Vemos a Horner en modo futbolista o entrenador argentino. Después regresa a la arrogancia de la Fórmula 1: “Hay que tener en cuenta que Ricciardo sólo ha ganado una carrera menos que Nico Rosberg, que ahora mismo es el líder, es algo notable”. Y también avisa de lo que puede ser el futuro: “Ahora vienen algunos trazados que nos pueden beneficiar”. En privado se muestra incluso más ambicioso.

Y es que, en las últimas seis carreras, el Smiler, ha sido el piloto más competitivo con 102 puntos desde Canadá a Bélgica por los 73 de Nico Rosberg y los 58 de Lewis Hamilton. Tras ellos Valtteri Bottas, extraordinario con 73, y Fernando Alonso, con 57, sólo uno menos que el británico de Mercedes. Y allá en noviembre aparece amenazante el circuito de Abu Dhabi, donde los puntos valen doble, ese espejismo del día a la noche donde todo puede pasar. Sonrisas de ensayo, sonrisas de verdad.