Juncadella: “Con el Mercedes gano yo y los cien mejores”

Parece recién salido de una clase de yoga Dani Juncadella en los momentos previos al instante más importante de su vida. Debutó ayer en un F-1 con Force India, cumplió con notable (decimocuarto), como suele. Habló con AS. Disfruten de este aprendiz de genio.

—Se ha convertido en el número quince de la lista de españoles que han participado en un gran premio de F-1.

—Bonito número. No son muchos para la historia de nuestro automovilismo. En España, desde la llegada de Alonso, creció exponencialmente este deporte y fue una de las razones por las que empecé a correr. Para mí supone alcanzar una meta soñada desde hace diez años, cuando empecé.

—Nunca ha disimulado su predilección por Alonso.

—Sí, claro. A mí me gustaba la F-1 desde siempre, en mi familia mi tío Luis Pérez Sala y mi tío Alex Soler Roig fueron pilotos, me gustaba Schumacher, las peleas con Hakkinen, pero de repente llegó Alonso, hizo una pole, ganaba carreras, un español... Imagine. Y pensé: ‘Yo también quiero ser Alonso’.

—Qué difícil es ser el mejor...

—Mucho. Es un deporte en el que es difícil destacar porque hay un factor suerte y un factor coche que no hay en otros deportes. No hay un ranking mundial de quién es el mejor. No puedes decir que Vettel es el mejor aunque haya ganado, pero el conjunto Vettel, equipo y coche ha sido lo mejor. Esto no es el tenis, aquí te aparece un Button que no iba a correr y de repente tiene un coche bueno y gana el Mundial.

—Campeón de F-3 y de Macao, piloto de desarrollo de Mercedes F1, del DTM y reserva de Force India. ¿Se está cumpliendo la hoja de ruta para llegar a la F-1?

—Sí. Había otros caminos y la ruta pensada era a través de la GP2, que es la más lógica, pero al fi nal tuve que tomar la decisión del DTM porque tiene más garantías de futuro. Y sí, por la vía DTM se está cumpliendo.

—En ese camino una vez estuvo en el proyecto de jóvenes pilotos de Red Bull. ¿Toda una experiencia?

—Fue una experiencia buena y mala. Me ayudó a mejorar mucho como piloto y como persona. Me llevé muchos palos y eso sirvió para ver las cosas desde otro punto de vista, que era ganar, ganar, ganar y sólo ganar. Fue algo muy bueno porque estaba en el mejor programa. Eso se ha demostrado porque han traído a Vettel, que ha ganado cuatro títulos, y ahora está Ricciardo que va camino de hacer algo parecido, y los pilotos que suben a F-1 demuestran que valen, pero también fue lo mejor salir de ahí porque entré en la órbita Mercedes en la F-3 y allí me trataban de manera muy diferente: cero presión, más humano.

—En Red Bull, Alguersuari terminó no logrando el objetivo y Sainz Jr. está en el camino. ¿Cree que Carlos conseguirá lo que no logró Jaime?

—No sé, con Jaime quizá se precipitaron un poco al principio, entró demasiado pronto, aunque entiendo que se pretendan batir récords de precocidad, pero lo que no entendí es que, cuando las cosas empezaban a salir bien, de repente plan Renove. Ese es el problema de Red Bull, tienen tantos pilotos que no saben qué hacer con ellos y lo de Jaime no tenía sentido, acabó muy bien la temporada, es mi amigo y es un caso que no quiero ni hablar con él de ello porque te vuelve loco, pero es algo que me ha servido como ejemplo para tener los pies en el suelo, porque un día estás arriba y al día siguiente en la calle. Y en el caso de Carlitos creo que lo tiene muy bien, porque ha tenido alguna temporada no muy buena como la pasada y ahí se ha visto el cambio de filosofía de Red Bull. Han sabido ver cosas buenas en él como en el test de jóvenes pilotos y le han dado una oportunidad, y otra, y otra. Y ahora está dominando en World Series. Eso es lo que importa.

—¿Si no llegase a disputar una carrera de F-1 se sentiría un fracasado?

—Para nada. Ahora no depende sólo de uno, depende de muchas cosas. He hecho ya sufi cientes resultados para demostrar que merezco un sitio en la F-1. Antes ganar Macao era tener un volante ya, ahora no porque no dependes de ti sino de la ayuda de un patrocinador, por ejemplo.

—¿Se puede llegar sin dinero a la parrilla de la F-1?

—Sí y no, llámalo padrino, programa de jóvenes pilotos, si no estás en algo así… Red Bull es un programa de jóvenes pilotos, pero es un patrocinador, es diferente, pero sí, hoy día si no estás en algo así es muy complicado llegar.

—¿La felicidad absoluta sería ganar una carrera?

—Ganar el Mundial, eso es a lo que aspiro, depende siempre de qué coche tengas, en qué equipo estés, pero me gustaría tener un coche para ganar el Mundial y una vez ganase el título ya sería muy feliz. Mi idea es ser campeón y después ya veríamos, no quisiera arrastrarme como otros. Alonso es otra cosa, ese casi es campeón con un coche que no podía serlo.

—¿Cuántas posibilidades hay de que esté el próximo año?

—El cincuenta por ciento.

—No está mal.

—Sí, hay posibilidades.

—Imagínese con el Mercedes de ese año. ¿Lucharía por las victorias? ¿Podría estar ahí contra Hamilton o Rosberg?

—Como mínimo sería segundo. A los cien mejores del mundo lo subes a un Mercedes y están ahí delante.

—¿Usted ganaría carreras?

—Lucharía por la victoria, sí, seguro, no en la primera carrera, pero después sí. Cualquiera que está ahí lo haría. Ha llegado Kvyat y cómo lo está haciendo. Llegamos muy preparados los jóvenes, venimos de categorías inferiores con nivel muy alto y haríamos resultados buenos.

—¿Y con el Force India?

—Cuanto mejor es el coche más fácil es, con el Force India estaría para puntuar y dar alguna sorpresa, como ‘Checo’ desde atrás, porque también es una buena cualidad mía aguantar bien las ruedas.

—¿A quién prefiere entre Rosberg y Hamilton para ganar el título este año?

—Rosberg. Yo soy más de Hamilton,pero me está gustando como plantea el Mundial Nico. Ha demostrado a mucha gente que es muy bueno y que Schumacher estaba ahí porque lo comparaban con Rosberg, y por eso decían que Nico no era bueno, pero ahora le está mojando la oreja a Hamilton.

—¿Volverá Alonso a ser campeón del mundo?

—Si tiene un coche algo competitivo seguro, sí, sin duda, si no difícil. Yo no soy el típico piloto al que le gustaría estar toda su vida corriendo en F-1 después de ganar un título y arrastrarse, lo que no es el caso de Alonso, porque él no ha vuelto a tener un coche para ganar y con lo que ha tenido ha estado a punto de ganar otros dos títulos, pero sí que hay otros pilotos que pierden la ambición y si a mí me pasara eso me iría.