24 horas de Le Mans
Antonio García: “Con este coche puedo divertirme de nuevo”
Antonio García, triple ganador en la categoría GT (2008, 2009 y 2011), cuenta con la última versión del Chevrolet Corvette para desafiar a Porsche, Ferrari y Aston Martin.
—¿Long Beach y Laguna Seca son la mejor inercia para llegar a Le Mans y aspirar a todo?
—Sí. Estrenamos el coche en las carreras más difíciles, las 24 Horas de Daytona y Sebring. Quizá no fue el momento oportuno, pues la preparación fue mínima para una carrera tan exigente como Daytona. Ahora estamos donde debemos para luchar contra el resto.
—Usted es de Madrid... ¿y del Real Madrid?
—Sí, no soy muy, muy aficionado, pero si hay que ser de alguien, sí, soy del Madrid.
—Lo digo porque CR7 es un crack, pero el C7.R que usted pilota, ¿también lo es?
—Es un gran coche, sí, completamente nuevo. En la categoría GT, en la base del coche se utiliza la base que comercializas. Había que competir con marcas que habían sacado coches nuevos como Ferrari o Porsche. Ahora, además de algunos sistemas como la inyección directa, que ya llevan nuestros vehículos de calle, tenemos un coche más competitivo.
—En el test, Porsche y Ferrari estuvieron delante. ¿Qué es lo mejor de cada uno?
—Estamos... yo creo que nadie sabe dónde estamos cada uno. La gente no quiere mostrar sus cartas. Ferrari y Porsche, teniendo unidades muy parecidas a las de GT Pro en GT AM, estaban forzados a ir deprisa, ya que los amateurs estaban yendo más rápido que ellos y perdían credibilidad. En calificaciones se verá alguna carta, pero hasta el sábado a las tres nadie lo hará claramente.
—¿Volverá a ser el ‘piloto nocturno’ del Corvette nº73?
—Habrá que ver cómo va a ser la rotación, pero cuando un piloto está a gusto y hace buen trabajo se tiende a alargar su estancia en el coche. El año pasado estuve algún período en que me tuvieron que bajar porque ya llevaba las cuatro horas máximas permitidas.
—Tras la muerte de Simonsen en 2013 se ha mejorado la seguridad. ¿En qué aspectos?
—Se ha reforzado, se ha cambiado la salida a la recta de Hunaudières, la curva de Tetre Rouge, donde tuvo el accidente Allan (Simonsen), se han separado los guardarraíles de los árboles. También se ha mejorado en la seguridad de los coches. Lo ves en cualquier GT por dentro y el Corvette es el que ves más robusto. Estamos muy protegidos y me siento seguro.
—¿Qué tiene de especial este Le Mans?
—Es otro Le Mans, aunque quizá particular por afrontarlo con un coche nuevo y competitivo. Viendo cómo se comportó en el test, la siento como una carrera en la que puedo divertirme de nuevo. Habrá una lucha muy cerrada entre las cuatro marcas. Al final, el que vaya más rápido, pero también el que menos tiempo pierda en boxes, es el que se va a llevar el triunfo. Estamos mentalizados y con ganas de que llegue la carrera.
—Y de aspirar al título...
—Ya toca.
—La última es obligada. Su amigo Fernando Alonso dará el banderazo de salida. De esta no se escapa: ¿Le convencerá por fin para competir juntos en Le Mans?
—Yo creo que a Fernando no hay que convencerle, creo que él tiene claro que quiere hacer esta carrera, el tema es cuándo será. A los dos nos gustaría hacerla juntos y a ver si coincide y aunque no sea en el primer año, que se dé esa oportunidad. Si la hace dudo de que la haga un año solamente. Ya le he dicho que en ese sentido me mantenga informado para ir haciendo planes yo también.