Para el KH-7 Epsilon cuanto más dura sea la carrera, mejor

Había una serie americana de televisión en los 70 que se llamaba ‘Tres en la carretera’. Jordi Juvanteny, José Luis Criado y Enric González son tres, pero sin carretera. En el Dakar, lo más parecido son esos pedregales que conducen al puro desierto. Su camión, el KH-7 Epsilon, lidera la categoría de 6x6 y Producción, casi como cada año. “Hay que pensar en el día a día y no castigar el vehículo. La competición ha empezado muy fuerte”, afirma Juvanteny. Él y Criado llevan veinte años juntos. En 2013 se sumó González. “Nos conocemos desde hace años, ellos me han ayudado muchas veces. En la cabina hay un ambiente, no te diría que fiestero, porque fiestero aquí no hay nada, pero hay muy buen rollo”, comenta Enric, que iba a integrar el equipo en 2008, cuando la carrera se canceló en Lisboa por amenazas terroristas.

En ese trío, Criado lidera el ranking de participaciones. “Llevo 24 años seguidos en el Dakar, el que más, que Foj no te la cuele”, suelta José Luis y sonríe. “Soy el que más y doy fe”, apostilla, con el añadido de que este jienense es notario de profesión. Juvanteny desvela que “el camión es el mismo que el año pasado, un MAN 6x6”. “La fiabilidad es nuestra gran baza. Hemos hecho alguna mejora, llantas de aluminio, suspensiones perfeccionadas, esperamos que no haya ningún problema. Vamos cargaditos, eso sí, llevamos recambios del equipo De Rooy, pero si no, no hay manera de poder ir”, aclara. “Somos privilegiados porque en época de crisis, de otro modo hubiera sido imposible venir. Así que, ¡bendito sea De Rooy y el que venga!”, exclama Criado, que habla de un Dakar “durísimo”, pero aclara: “A nosotros nos conviene, cuanto más duro, mejor”.

A su lado, Enric asiente. Dejó el todoterreno y disputa su cuarta edición en camiones. “Parece la evolución natural, pero depende del año, si encuentras patrocinador, etc... No significa que en 2015, si voy, repita con ellos, que estaría encantado, pero si me ofrecen ir en un coche...”. Y Juvanteny y Criado estallan en una carcajada. “Nos cambia por un plato de lentejas”, apunta Criado.

El KH-7 Epsilon busca revalidar su título en 6x6, pero como dice Criado, también pretenden “hacer un servicio a los De Rooy”. “Como en 2013, que nos dio tiempo a todo”, aclara. “Habrá guerra no sólo entre Kamaz y De Rooy. Están los Tatra, los MAN, que tienen un equipo de cinco o seis años y buenos camiones. Será apasionante”, comenta Juvanteny. Apasionante y dura. Pese a ello, en la cabina no se pierde humor. “Que De Rooy nos coja de asistencia es un montaje para que no ganemos nosotros”, dice Enric, junto a Jordi y José Luis, tres en la carretera. Sin carretera, pero muy felices.