Lorenzo y Dani Pedrosa sufren pero están en Laguna Seca

A las 8:58 entró Pedrosa en la clínica móvil del circuito de Laguna Seca. Allí aguardaba el doctor Rossi, que acudió minutos antes en su silla de ruedas y en compañía de sus ayudantes. Diez minutos fueron suficientes para que el catalán recibiera el OK del médico con el que intentar correr. Instantes después, a las 9:14, el que acudía a superar el examen era Lorenzo, y también lo superó. Parecía que lo más difícil estaba conseguido, pero qué va, más difícil que lograr el beneplácito médico es domar los 260 caballos de potencia de la Honda y la Yamaha sobre el revirado trazado californiano con sendas clavículas izquierdas tocadas.

La de Pedrosa no requirió operación y su duda si infiltrarse o no, porque eso fue lo que le provocaron de nuevo los mareos en Alemania y lo que, a la postre, le impidió correr allí. Aquí prefirió salir el primer día sin el pinchazo de rigor y, para ahorrarse esfuerzos y dolores, optó por no rodar en la primera sesión, con la pista algo húmeda por la neblina. Por la tarde sí lo hizo, para un total de 23 vueltas y el undécimo mejor crono. Se le notaba que sufría. Y lo mismo vale para Lorenzo, aunque en su caso sí que salió a las dos sesiones libres, sin infiltración en ambos casos. Su resultado fue bastante mejor, sexto con 22 vueltas, al estilo Assen hace tres semanas, a sólo 0.4.

Son el campeón y subcampeón de 2012 y los más inmediatos perseguidores en la general de un Márquez que tiene ante sí el reto de hacer lo que no ha hecho nadie: ganar al primer intento en Laguna Seca en la clase reina. En la primera sesión se lo tomó con relativa calma y fue tercero, tras Crutchlow y Rossi. En la segunda, fue a por nota y se puso al frente de tabla de tiempos a 21 minutos del final, haciéndose el Sacacorchos como si lo conociera de toda la vida, ¡incluso recortando por el arcén!, y dejando derrapadas de vértigo. Puro espectáculo lo del pequeño genio, que acabó primero con 0.2 sobre Bradl.

Su mayor oponente podría ser Rossi, al que se le ve enchufado, y también tienen buena pinta Bradl, Dovizioso y Crutchlow, como casi siempre. Y Espargaró (séptimo) lo sigue bordando.