Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

'Pirelligate'

La FIA reprende a Mercedes y Ferrari se queda "perplejo"

El Tribunal Internacional consideró que el equipo alemán, que no podrá ir al test de jóvenes en Silverstone, y Pirelli infringieron el artículo 22 del Reglamento Deportivo aunque sin mala fe.

Ross Brawn a la entrada del Tribunal de la FIA.

Mucho ruido y pocas nueces. Así se podría resumir el 'Pirelligate', el test privado y secreto que Mercedes hizo en Montmeló en mayo. Tras semanas de especulaciones, fotos espías, elucubraciones de posibles sanciones y una vista ante el Tribunal Internacional de la FIA propia de una superproducción de thriller judicial... la decisión se quedó en una reprimenda para Pirelli y otra para Mercedes, un abono de un tercio de los costes de la investigación y el proceso para cada parte (el otro lo paga la FIA), y el añadido de que el equipo de Brackley no podrá asistir al test de jóvenes pilotos, del 17 al 19 de julio en el circuito de Silverstone.

Es decir, que los cuatro miembros del tribunal, con el británico Edwin Glasgow como presidente, los consideraron culpables de infringir el artículo 22 del Reglamento Deportivo, aunque sin mala fe ya que “el test no se hizo con la intención de que Mercedes obtuviera ventajas deportivas”. Eso sí, entre las razones esgrimidas en la argumentación para la decisión el tribunal afirma, entre otros puntos: “No es concebible que Mercedes no obtuviera ventaja material de los tres días de test aunque sólo como resultado de rodar con su coche, independientemente de cualquier asunto relacionado con los neumáticos”.

Basándose en esa “ventaja deportiva injusta” respecto al resto de los equipos de la Fórmula 1 se ha tomado una decisión salomónica: Mercedes disfrutó de tres días extra de pruebas y ahora se perderá esas mismas jornadas que son las que componen el test de jóvenes. Mal menor para la escudería que dirige Ross Brawn, que dejó clara su voluntad de no recurrir el veredicto, pero sin duda grave contratiempo para los novatos que soñaban con pilotar el W04 en la mítica pista inglesa, entre los que posiblemente estarían Dani Juncadella o el británico Sam Bird.

Daños colaterales aparte hubo alivio en Mercedes, tranquilidad en Pirelli y satisfacción con algún pero en los instigadores de la protesta: Red Bull. “Lo planteamos porque queríamos claridad sobre si se permite realizar un test durante la temporada con un monoplaza actual. Siempre es preferencial probar con pilotos oficiales que con los probadores, pero nosotros no decidimos la sanción. Mercedes violó el reglamento deportivo y el Código Deportivo, y tenía que decidir el Tribunal y ellos han tomado su decisión”, afirmaba Christian Horner, jefe de la escudería energética.

Menos contentos se han mostrado en Ferrari que en su web dejan clara su postura: “Uno se queda perplejo al ver que alguien que es culpable queda exonerado pese a haber obtenido una injusta ventaja. No me digan que entrenarte a tus anchas tres días Montmeló es lo mismo que hacer pruebas junto a otros nueve equipos en Silverstone con algunos jóvenes valores al volante y en un lugar en la que la meteorología puede ser muy variable”. El Pirelligate ya es historia...