"Llevo años estando a 50 puntos del primero"

Después de quedarse fuera de carrera en la primera curva por segunda vez esta temporada y por un toque de un Lotus (en Spa fue Grosjean, en Suzuka fue Raikkonen), Fernando Alonso estaba con pocas ganas de hablar. Necesita tranquilidad, fue la explicación oficial. Y así se respeta. No obstante, antes de marcharse compareció ante las cámaras de Antena 3. El asturiano lamentaba su mala suerte en la arrancada y el toque con el finlandés al que sustituyó como primer espada de Ferrari en 2010. Fernando no sabe qué hubiera pasado sin ese momento decisivo y se agarra a la teoría de la suerte justa: "Nunca se sabe cómo nos hubiera ido, pero ha sido una pena la salida. Creo que Raikkonen me tocó un poco una rueda de atrás, pinché y luego la primera curva ya no la pude dar. Así son las carreras, unas veces nos pasa a nosotros y otras, a los otros. Ahora hay que pensar en la siguiente, en Corea".

Alonso sabe que la ventaja ha disminuido de manera notable, pero intentará que los cuatro puntos que lleva sean suficientes porque, dice, está acostumbrado: "Llevo años estando a 50 puntos del primero, ahora estoy cuatro por delante. Quedan cinco carreras es como un mini campeonato, digamos. Salimos los dos con los mismos puntos y a ver quién hace más en cinco carreras. Hay que intentar hacer un punto más que él en estas cinco y, bueno, a ver si recuperamos un poco la suerte".

Como hizo el día anterior, el primer piloto de Ferrari instó a su escudería a dar un salto adelante si quieren competir contra Red Bull y el resto. Así explicaba que, pese al segundo puesto de Massa, el monoplaza no está al nivel: "Ayer vimos otra vez las carencias del coche. Llevamos seis carreras con el mismo coche, sin poner ninguna pieza nueva, y el segundo es un poco gracias a las circunstancias, a que Felipe está haciendo una carrera perfecta, conduciendo bien. Hay gente con coches mucho más rápidos que están cometiendo un error tras otro, saliéndose de la pista... Y gracias al buen trabajo de Felipe, está segundo".

Es evidente que Fernando no cree que en Maranello no están haciendo su trabajo, pero también resulta claro que el coche no ha dado un salto adelante desde Silverstone, mientras que Red Bull disponen de evoluciones continúas. En Singapur, Ferrari llevaba una gran evolución que por los problemas en el túnel del viento no ha funcionado como se esperaba. Ahora Alonso trata de motivar a su equipo, lanza un grito de auxilio, está en mitad del océano con una tabla y necesita al menos una vela para llegar a tierra. Si se la dan alcanzará la orilla antes que Vettel y su yate.