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Fórmula 1 | GP de Europa

Vettel regresa al pasado y Alonso a los milagros

El alemán de Red Bull logra una nueva pole, por delante de Hamilton y Maldonado, e iguala a Clark y Prost como el tercero con más de la historia. El español de Ferrari sale undécimo en busca de la proeza.

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<b>UNA JORNADA DIFÍCIL. </b>Ferrari vivió una dura calificación en la que sus monoplazas quedaron fuera de la Q3. Alonso sale undécimo y Massa decimotercero.
reuters

Es imposible buscar el símil. ¿Qué dura cuatro milésimas? Dicen que un parpadeo son seis milisegundos, un suspiro mucho más, de dos a seis segundos. Es complicado saber qué tendría que haber hecho Alonso para ganar cuatro milésimas a Di Resta y entrar en la Q3 de la calificación, es decir entre los diez elegidos que luchan por la pole, es decir intentar plantar batalla a los mejores, es decir... plantear debate a sus enemigos, el primero y el segundo de ayer: Vettel y Hamilton. Pero no fue así, el Ferrari de Alonso estuvo más cerca que nunca del primer puesto en cuanto a tiempo y se quedó casi más lejos que nunca este año en resultado (salió 12º en Australia). Así son las cosas. Así es esta Fórmula 1 de clase media en la que la igualdad se cifra en parpadeos.

Se esperaba el despegue definitivo de los grandes en Valencia, ese momento en toda temporada en el que el dinero y las evoluciones hacen que McLaren, Red Bull y Ferrari, en el orden que quieran, comienzan a alejarse de los rivales que cuentan los euros en huchas de hielo. Pero no ha sido así. Al menos en cuanto a la escudería italiana. Y a los segundos pilotos de los ingleses y los austriacos. Button asoma noveno, Webber ve los grandes duelos desde otro planeta, decimonoveno. Raro.

Y entre los que no parecían, pero sí están, Maldonado, tercero, de nuevo entre los mejores en España. Y los dos Lotus, al fin delante. Grosjean cuarto, y Raikkonen, quinto. Un dato, entre los diez primeros sólo hay un motor Ferrari, el del velocísimo e irregular Kobayashi. El resto de caballitos rampantes buscaran la remontada. O el milagro.

Ahí regresa Fernando. Sale desde la undécima plaza buscando lo que sólo él sabe hacer, lo que sólo de él se espera. El asturiano nada más bajar del coche, gesto serio y análisis sosegado lejos en el tiempo, descartó el podio. Pero nunca se sabe con este genio. Su coche es rápido, está apenas a tres décimas de la pole y tiene un juego más de blandos. Acertar en la estrategia, hacer una salida de esas de grabar en vídeo, o disco duro vayamos con los tiempos, confiar en una menor degradación, adelantar donde no se puede. Milagros Alonso de nuevo en sus pantallas. El podio.

En ese lugar donde se reciben los aplausos de las más bellas tienen un sitio Vettel y Hamilton. El alemán sacó talento en la lucha por la pole y volvió a casa. Ya tiene 33, tantas como Clark, como Prost. Sólo dos tienen más que este germano de calidad indudable, la leyenda de Senna (65) y Schumacher (68), el libro de estadísticas andante. Nadie más. Mucho Vettel. Grande Seb. De nuevo le han dado un coche reluciente y le está sacando brillo. La carrera será dura, calor tremendo, neumáticos que se derriten. Todo puede pasar, ¿incluso el milagro?