Fernando y una F-1 "mitad deporte, mitad política"

Que la F-1 está deseando irse de vacaciones no es un secreto y que los pilotos de F-1 necesitan descanso es evidente. Pero antes está la carrera de Hungría, el lugar donde Fernando Alonso ha celebrado sus últimos cumpleaños: "Para mí es más importante cumplir 30 carreras en Ferrari que los 30 años, porque al final años cumples siempre y es uno más, eso sí lo hago en Hungaroring como casi siempre". Y lo hace con ganas de celebrarlo con una victoria, la que sería la segunda del año. Para conseguirlo el asturiano está trabajando duro esta temporada, más que nunca; este mes de julio sólo ha estado cuatro días en casa, el resto, de Italia a los circuitos y de las pistas a la fábrica de Ferrari: "No, no iré en vacaciones a Maranello, entre otras cosas porque la fábrica está cerrada esos días".

Al asturiano también le preguntaron qué le falta por hacer en la vida o qué cree que debería haber hecho: "Eso lo haré estos días de vacaciones que tengo ahora. En realidad el deseo que tengo es que tengamos salud, que todo siga como hasta ahora en mi familia, los logros personales o profesionales no los pido porque eso se logra con trabajo". Y contó más...

Alonso está en la F-1 y hubo una época en la que llegó a un circuito diciendo que no era un deporte. ¿Has aprendido a amar la F-1? "¿Amar? Ummm, más bien he aprendido a convivir con la F-1, es un deporte mitad deporte, mitad política, está muy politizado y tiene muchos intereses, y eso la gente tiene que saberlo". Dicho queda.