Ricciardo lleva la locura a Hispania

Uff, las chicas de prensa de Hispania, pese al frío de Silverstone, se secaban el sudor ayer en el circuito británico mientras Daniel Ricciardo sonreía. El nuevo chico de oro de la parrilla, una de las promesas más brillantes del automovilismo mundial, va a debutar en la escudería española al volante de un F-1 y su presencia ha subido a la escudería a la nube de la F-1. El primer día del australiano en HRT fue estresante e increíble. Ayer se hicieron más entrevistas en Hispania que en todo el campeonato anterior. Comienza una nueva era en el equipo, la era Ricciardo.

El chico sonriente comenzó poniéndose a los mandos del coche sin encender el motor, fotos aquí y allá, Red Bull en un coche hispánico... Daniel era la amenaza para Buemi y Alguersuari, pero ha terminado en el monoplaza español y está feliz: "No esperaba correr este año, por lo que ésta es una gran oportunidad para mí y todavía estoy un poco impactado".

Daniel estuvo en la rueda de prensa de la FIA y no se libró de una buena batería de preguntas: "Estar aquí es algo que he soñado desde que era niño. Para la carrera creo que el primer objetivo es tratar de acabar, acumular kilómetros bajo mi cinturón y ganar la experiencia en este nivel de carreras. Eso es lo más importante".

Ahora su rival es Liuzzi: "Mi compañero tiene mucha experiencia y puedo aprender algo de él". Educado, paciente, sonrisa perenne. Buen fichaje para Hispania. A las ocho abandonaba el circuito rumbo a casa. Aquí tiene su segunda vivienda y dormirá en su cama. Suerte, Daniel.