Automovilismo | la intrahistoria
Daytona, paradoja de los Earnhardt
Gloria y tragedia en la mítica pista
'The Intimidator' (El Intimidador) es el piloto más laureado de la historia de la Nascar junto a Richard Petty. Ganó siete títulos y 76 carreras, pero Dale Earnhardt fue algo más, un dios de la velocidad. En Estados Unidos dicen que el verbo ganar se creó para él y por lograrlo, Earnhardt era capaz de todo. "It's just racing" (Son simplemente carreras), afirmaba sonriente cuando le cuestionaban su agresividad. Solía afirmar que corría con desventaja al no poder coger rebufos... ya que los demás pilotos se apartaban cuando llegaba. De ahí su apodo. "Por ganar mi octavo título pasaría por encima de mi madre, arrollaría a mi mujer y sepultaría a mi hijo", llegó a decir en broma... y un poco en serio.
Y esa búsqueda acabó con su vida. En la última vuelta de la Daytona 500 de 2001 se estrelló contra un coche y los muros de protección. Perdió la vida casi a la vez que su hijo Dale Jr. cruzaba la meta en segunda plaza. El dorsal 3 se retiró en su honor y Dale Jr. juró que ganaría la Daytona 500 para honrarle. Lo logró en 2003 y en la edición de 2011 que se celebra el domingo saldrá en la pole. Dos días antes se habrá cumplido una década del terrible final de uno de los grandes mitos americanos y Dale Jr. quiere brindarle su particular homenaje.