"Pasé de optar a la pole a perderlo todo"

Nada más bajarse del coche, Alonso puso el grito en el cielo. En el largo paseo hasta su box, sufrió el enésimo sinsabor de una temporada en la que le ha abandonado la suerte. Allí se encontró con los micrófonos de Telecinco y TV3 y dejó sus primeras impresiones: "La carrera está perdida. Si decíamos que salir octavo o noveno era ya difícil, ahora ya no hay nada que hacer porque aquí no se puede adelantar. Podía mejorar constantemente, esta vez podía estar muy arriba, si no en la pole, que es muy difícil, sí podía estar entre los dos o tres primeros de la parrilla, seguro".

Muy enojado, el asturiano ni siquiera se consoló con la posibilidad de salir a una parada y hasta los topes de gasolina: "Saldremos por salir. Necesitamos un milagro, y no existen. Lo que hay que hacer es un mejor trabajo el sábado en un circuito como éste, en el que no se puede adelantar. Salir el 15º es perderlo todo". Ha sido, según la estrella española, su mayor decepción del año: "Con la de carreras en las que un fallo mecánico no importaba, ha tenido que pasar una avería en ésta. Nunca había ido tan bien el coche. Había sido primero en las dos sesiones libres y rodaba regularmente sexto y con mucho peso. Hemos perdido la mayor oportunidad que hemos tenido hasta el momento".

Sobre la táctica a seguir y la posibilidad de que salgan los coches de seguridad afirmó: "La estrategia no importa mucho. Más que una estrategia hay que preparar un milagro". Después, en su habitual cita con la prensa escrita española, explicó su decepción: "Aquí, tras liderar la sesión del viernes y la de por la mañana, y tras clasificarme con facilidad sexto en la crono uno, estaba decidido a atacar a fondo. Teníamos, además, dos opciones en la crono tres para escoger estrategias. Seguramente, con el buen ritmo que teníamos, habríamos elegido la de ir un poquito más cortos de combustible. Estar en la primera línea de salida no era descabellado esta vez".

Ahora ni siquiera el safety car puede arreglarlo: "Esta pista es tipo Mónaco. Hay que rodar detrás de la gente que tengas delante y ya está. La salida del coche de seguridad sí que te puede beneficiar, pero te beneficia más si estás el undécimo o el duodécimo, porque eres de los primeros que van a una parada. Si estás el quince te beneficia a ti y a los que van el catorce, el trece, el doce, el once... al grupo de los que van a hacer lo mismo que tú. El coche ha ido bastante bien todo el fin de semana, por lo menos el mío. En este circuito el motor cuenta bastante menos y por eso estábamos al nivel de los mejores, aunque en otras pistas sufrimos mucho más. Por eso resulta muy duro pasar de luchar por la pole a olvidarte de la carrera. Si aquí sales delante el podio está casi asegurado".

Por último, el asturiano respondió a la gran pregunta: ¿Influirá todo esto en su decisión de quedarse o irse de Renault? "No me planteo nada porque el coche ha ido quizá mejor que nunca. Seguramente seamos, junto con McLaren y Ferrari, el equipo que más ha mejorado durante el año. En Melbourne estábamos a un segundo de los BMW y ahora estamos delante. Hemos dado un salto muy bueno y eso es un punto a favor del equipo. No pasa nada porque se averíe el coche; estas cosas pasan. Lo triste es el momento en el que se produce. Yo me salí en Canadá, en Mónaco... y fueron errores míos".