"Estoy orgulloso de ser negro en la Fórmula 1"

Hay pilotos a los que no les gustan las entrevistas, pero seguro que cambiarían de idea si quien estuviera a cargo de hacer las preguntas fuera una supermodelo. Eso es lo que le sucedió a Lewis Hamilton, entrevistado para la edición inglesa de la revista GQ por Naomi Campbell. El ingles, encantado. Entre las preguntas obligadas, la que hace referencia al color de su piel. "No me siento especial por ser negro en la F-1, pero sí es cierto que oigo que otros lo comentan y siento mucho orgullo".

Las preguntas eran, sobre todo, de tipo personal. Así nos enteramos de lo que hace para relajarse: tocar la guitarra. "No soy Jimi Hendrix, pero la verdad es que me gustaría grabar un álbum en el futuro. Me gusta el rap y Bob Marley, aunque hace años que no voy a un karaoke". Y como afición más allá de la F-1, el fútbol: "De no ser piloto hubiera sido futbolista. No se me daba mal".

Entrando en materia deportiva explicó que lo que menos le gustó del pasado Mundial: "Dijeron que había dicho palabrotas a Ron Dennis y eso no es cierto". También explicó a la modelo cómo es la relación con su controvertido padre: "Ha sido dura. Era a la vez padre, consejero y mánager. Es muy persistente y sabe como hay que hacer las cosas para tener éxito. Yo sé que nunca me defraudará y él sabe que yo, tampoco. Es una persona que siempre lleva la razón". El inglés demuestra ambición como piloto, pero no se plantea batir el récord de Schumacher: "Quiero ser campeón del mundo, pero no siete u ocho veces". Explicó que hay personas que le impresionan: "Me pasaría si me cruzase con Ali y cuando te vi por primera vez, Naomi". Un figura el inglés.